La Fundación Emilio Barbón ha otorgado su X Premio anual a la Unidad Terapéutica y Educativa (UTE) del Centro penitenciario de Villabona. El jurado eligió por unanimidad esta candidatura destacando «la actividad integradora y de convivencia dentro de las difíciles condiciones de vida de la población reclusa». Destaca asimismo la labor desempeñada desde su origen, en el año 1992, por parte de los funcionarios, «poniendo de relieve la tarea promotora de Faustino García Zapico y Begoña Longoria González».

Este premio ha sido concedido a un proyecto que, denuncian los familiares de los usuarios, está siendo sometido a un «progresivo desmantelamiento» por parte de la dirección de la prisión asturiana, a través del despido de trabajadores y la disolución del equipo multidisciplinar. Con este premio, aseguró la directora general de Emigración, Begoña Serrano, que ejerció como presidenta del jurado, «queremos reconocer la labor que realiza y pedir que se mantenga esta iniciativa».

El jurado analizó otras doce candidaturas que fueron presentadas junto a la UTE de Villabona al galardón. El premio está dotado con 3.000 euros y una escultura de Miguel Ángel Lombardía. Será entregado en un acto que se celebrará durante el otoño.

El jurado estuvo formado por Begoña Serrano; Jesús Llaneza, director de la Fundación Emilio Barbón; el economista Jesús Arango; el ex director de la Fundación Marino Gutiérrez, Rufino Roces, y Miguel Barbón y Rafael Barbón, patronos del colectivo organizador.