Las centrales térmicas de carbón de España tienen almacenadas cerca de 6 millones de toneladas de mineral, el equivalente a la producción de todos los pozos de la empresa estatal Hunosa en los últimos siete años. Con esos stocks, las centrales apenas están comprando carbón nacional, lo que agudiza la complicada situación de las empresas mineras que no tienen cerrados contratos de suministro.
A esos repletos almacenes de las térmicas de carbón se ha referido el Gobierno de España para justificar el bajo cumplimiento de la resolución que fijaba para este año el volumen de generación eléctrica con carbón autóctono. "Las centrales térmicas tienen unos stocks de más de 6 millones de toneladas métricas de carbón. Esto lleva a que consuman carbón de sus stocks en lugar de comprar el carbón al que están obligadas por la resolución", señaló el Gobierno del PP en respuesta una pregunta sobre el cumplimiento del real decreto que incentiva el consumo de mineral nacional planteada en el Congreso de los Diputados por los parlamentarios del PSOE Isabel Rodríguez, Alejandro Alonso y la asturiana María Luisa Carcedo.
No obstante, el Gobierno de España destaca que "son varias las razones" que explican el bajo cumplimiento de la resolución y no sólo el volumen de mineral almacenado. En concreto apunta otras tres razones que a su vez también han generado esos abultados stocks de mineral en las centrales térmicas. Son:
La baja demanda eléctrica. Es el primer factor que destaca el Gobierno. Señala que la demanda eléctrica, pese a que ya ha comenzado a recuperarse, ha llegado a ser la misma que en 1995. "Si la demanda eléctrica es baja, el sistema eléctrico, considerando que para la cobertura entran en primer lugar las instalaciones renovables, no dispone de hueco térmico para otras tecnologías", apunta el Gobierno en referencia a las centrales que queman carbón.
La preferencia de las renovables. A a circunstancia anterior se debe añadir, destaca el Gobierno, "el hecho de que por las condiciones climáticas de los primeros meses del año, con alta producción de generación eólica e hidráulica, el hueco térmico ha sido escaso", y por tanto las centrales que queman mineral han tenido una participación muy limitada en el mix de generación eléctrica.
El carbón importado. Y el Gobierno apunta un tercer factor para justificar el incumplimiento de los consumos de mineral nacional y es que "el precio del carbón importado al resultar más barato que el carbón autóctono desplaza el consumo de éste".
Todas esas circunstancias están provocando que no se alcancen ni de cerca os objetivos del real decreto de 2010 que garantizaba la quema de carbón autóctono en diez térmicas españolas, entre ellas las asturianas de Soto de Ribera y Narcea. Además, la vigencia del real decreto finaliza cuando acabe el presente año. "A partir de esa fecha, tanto la generación eléctrica con carbón nacional como la producción de mineral y el precio del mismo formarán parte del ámbito de gestión de las empresas implicadas: eléctricas y mineras", señala el Gobierno en su respuesta parlamentaria a los tres diputados socialistas.
No obstante, el Ejecutivo del PP, tal y como acordó con los sindicatos mineros FITAG-UGT, CC OO de Industria y USO y la patronal minera Carbunión en el nuevo plan del carbón 2013-2018, ha ordenado al operador del sistema eléctrico que trabaje "para establecer un procedimiento que permita, a partir del 1 de enero de 2015, y sin costes adicionales para el sistema eléctrico, mantener un hueco térmico suficiente para el carbón, dado su carácter de único combustible autóctono capaz de contribuir a la seguridad del suministro en casos excepcionales". En concreto el Gobierno destaca que "está trabajando en una propuesta normativa para incentivar el funcionamiento de las térmicas de carbón autóctono que ayudará al aprovechamiento del mineral en esas instalaciones de producción de energía eléctrica". No obstante, añade que "ese nuevo mecanismo, una vez terminado, deberá tener el visto bueno de la Comisión Europea".
Por su parte, los sindicatos mineros están a espera de que se concrete el mecanismo y reclaman al Ministerio de Industria, energía y Turismo celeridad en los trámites. "El nuevo mecanismo tiene que entrar en vigor con el nuevo año, no podemos sufrir continuos retrasos en todas las medidas vinculas al sector minero", señaló José Luis Alperi, secretario general del SOMA-FITAG-UGT.
