La recién creada asociación para el desarrollo rural de la Montaña Central de Asturias, que se encargará de gestionar los fondos para del programa de ayudas europeas Leader, ha fiado buena parte de su éxito a un proyecto estratégico que defina las líneas maestras de por donde debe caminar el futuro de estos territorios. Los cálculos que maneja el colectivo pasan porque en el próximo lustro recibirán en torno a 11 millones de euros para invertir en el desarrollo de la comarca. Y para que ese proyecto sea la base de un futuro próspero en la Montaña Central, la nueva asociación ha acudido al CeCodet para solicitarles la elaboración de un plan de estratégico de desarrollo, que ya tiene en sus manos. El camino será intenso, pero las líneas maestras ya están trazadas. Y pasan por aprovechar las grandes potencialidades del territorio, tanto las naturales como las industriales.

Fermín Rodríguez, director del CeCodet, ha sido uno de los investigadores que ha elaborado el documento. Junto a él, un equipo multidisciplinar formado por José Ángel Fernández (Licenciado en Geografía), Carlos Argüelles (Licenciado en Ciencias Ambientales), María Concepción Escobedo (Licenciada en Derecho), y José Luis García y Alejandra Boto (profesores universitarios). La mezcla del trabajo de estos profesionales ha dado como resultado una guía en la que se pauta el posible destino de las inversiones del Leader para desarrollar y diversificar económicamente y de forma eficaz la Montaña Central.

El proyecto elaborado por el CeCodet se fundamenta en un estudio pormenorizado del territorio y en un trabajo de campo recogiendo las sensibilidades de la ciudadanía. Los expertos analizaron la población y la tendencia demográfica de la comarca, el mercado laboral, los sectores de actividad, los equipamientos e infraestructuras, el paisaje y el medio ambiente, realizando además un diagnóstico de cada uno de estos parámetros para que el informe resultante fuese mucho más pormenorizado. A partir de ahí, desarrollaron un plan de estrategia territorial para la Montaña Central, que está basado en las capacidades de la comarca, los elementos de valor añadido y los retos hasta el año 2020.

De esta manera, elaboraron un mapa en el que se puede observar cada territorio y las potencialidades del mismo, con diferentes áreas en las que desarrollar proyectos de diversa índole que consigan dinamizar la Montaña Central. En este punto, se ubicaron, por ejemplo, varios parques rurales: en la zona del Aramo, en la zona del Huerna y en Peña Redonda. Además, también se valora la posibilidad de aprovechar el patrimonio histórico, con la creación dos áreas más, una en torno al Monsacro, y otra en el enclave de La Carisa. La minería, como no, jugará también una parte crucial en el futuro de la comarca de la Montaña Central, y el proyecto del CeCodet recoge dos parques mineros, uno en el valle de Turón y otro en torno a las minas de cobre de Texeo, las más antiguas de Europa.

El deporte como dinamizador turístico debe formar parte del futuro de la comarca, y para ello se definen dos parques de aventura, uno en Cotobello y otro en la zona de Polio, en Mieres, que desde ahora podrá formar parte del territorio subvencionado por el Leader de la Montaña Central. En esta línea también se enmarcaría la creación de una ruta de esquí de fondo o de aventura que uniese dos de los grandes valores de la comarca, la estaciones de Valgrande-Pajares y Fuentes de Invierno.

Las medidas a aplicar para poder hacer realidad el proyecto plasmado en el mapa territorial se especifican en una estrategia de especialización inteligente y un plan de acción, que se dividen en nueve ejes, diferentes líneas de actuación y una serie de medidas concretas dentro de esta estructura.

Los ejes que se plantean son "innovación agroforestal", "territorio vaquero", "industria rural", "territorio ciclista", "los paisajes de la aventura", "alimentación inteligente", "montañas de tradición mineral", "máquinas, herramientas para el desarrollo de los pueblos" y "agroemprendores". En cada una de estas áreas se plantean medidas concretas para fomentar los diferentes territorios y actividades que posteriormente resulten de futuro para la Montaña Central. Por poner algunos ejemplos, en el caso del "territorio ciclista", se especifican que las ayudas del Leader se pueden aplicar en la creación de alojamientos temáticos o empresas de servicios, mientras que en el eje de "montañas de tradición minera" el dinero se puede emplear en creación de un parque de la Minería de Turón o de un parque de la Gran Historia de La Carisa. Así, hasta 126 medidas a desarrollar.

Por último, el CeCodet le da especial importancia al "Método Abierto de Coordinación", que es el que se aplica no sólo para la puesta en marcha del plan sino también para su seguimiento. Dentro de este apartado se enmarcarían una serie de medidas como el mantenimiento de desarrollo local participativo, la simplificación del acceso a las ayudas, o la organización de seminarios y jornadas técnicas. También se apunta a la necesidad de formación del personal y de cooperación con otras administraciones como León.

La asociación para el desarrollo rural de la Montaña Central de Asturias ya tiene el documento en sus manos. Con esta guía, nada quedará a la improvisación, y el empujón definitivo a unos territorios que aún no han superado la crisis minera y cuya población está cada día más envejecida. La Montaña Central quiere rejuvenecerse en todos los aspectos.