Alberto Rubio vuelve "a las barricadas". El que fuera secretario general de CC OO de Asturias encabeza la candidatura presentada por los afiliados críticos con la decisión de abandonar el Montepío. Junto a él habrá responsables de las juntas locales, trabajadores en activo e incluso un miembro de la dirección estatal de CC OO de Industria, como es Rufino Ordóñez, adjunto a la secretaría de Política Industrial.

La asamblea de la mutualidad minera, que se celebrará el próximo viernes en Oviedo, será la encargada de dar luz verde a la candidatura presentada por los críticos, que saldrá adelante gracias, entre otras cosas, al apoyo que le van a brindar los mutualistas del SOMA-FITAG-UGT. Como único socio protector tras el abandono de Comisiones, la central que lidera José Luis Alperi tenía la potestad de cubrir cuatro de las sillas vacantes en la Comisión Regional por su condición de socio protector. Además, al tener la mayoría sindical, también podía hacerse con las cuatro plazas que corresponden a los mutualistas para miembros de su sindicato. Sin embargo, tras conversar con los promotores de la candidatura de los críticos de CC OO, el SOMA tomó la decisión de ceder los 8 puestos para que los mutualistas afiliados a la otra central puedan estar representados. Fuentes del SOMA señalaron que esta situación supone una oportunidad para "dar estabilidad al Montepío".

La candidatura de CC OO será presentada mañana, en Langreo. La liderará un histórico del sindicato, Alberto Rubio Muñiz, que tras haberse alejado de la primera línea, vuelve ahora para ostentar la representación de los miles de mutualistas de Comisiones Obreras en el Montepío. No lo hará dentro de la lista de cuatro miembros que le corresponde presentar al SOMA como socio protector y que ocuparán cuatro miembros de CC OO, sino que forma parte de la otra lista del cupo de mutualistas. Llega además acompañado de Rufino Ordóñez, miembro actual de la dirección federal de Comisiones de Industria, y que también se ha mostrado contrario a que su sindicato abandone la mutualidad minera. La idea de este grupo de críticos es clara: cambiar el Montepío desde dentro sin excluirse de sus órganos de dirección.