La eurodiputada de Izquierda Unida Ángela Vallina denunció ayer la "irresponsabilidad" mostrada por el alto funcionario de la dirección general de Mercado Interior e Industria, Carsten Bermig, con quien mantuvo ayer un encuentro acompañada de los alcaldes de Mieres y Langreo, Aníbal Vázquez y Jesús Sánchez, respectivamente, y José Luis Villares, responsable de industrias extractivas de CC OO. Tras este infructuoso encuentro, Vallina anunció que solicitará una reunión con el comisario de Energía y Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, para tratar la situación de la minería en Asturias y las perspectivas del sector a partir de 2018

Vallina criticó el trato recibido por Bermig, quien "se ha dedicado a lanzar balones fuera" y a "no contestar a una sola de las preguntas que le hemos planteado". Para la eurodiputada, "es inadmisible la actitud de la Comisión Europea, que se está dedicando a mirar para otro lado, como hace el Gobierno de Mariano Rajoy, con el sector de la minería del carbón". Una actitud que "deja en el limbo a cerca de 4.000 trabajadores en el Estado, 200.000 en toda la Unión Europea, y pone en peligro la sostenibilidad de los municipios de las comarcas mineras". La eurodiputada había solicitado en junio una reunión con la comisaria de Mercado Interno e Industria, Elzbieta Bienkowska, tras las dudas que el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, había transmitido a los sindicatos en torno a la aplicación del Marco de Actuación para la minería del carbón y las comarcas mineras en el periodo 2013-2018. Bienkowska contestó a la eurodiputada de IU que Bermig sería el encargado de recibirla en Bruselas, ya que se trataba de "la persona competente" para este tema. Sin embargo, el alto funcionario ha decidido que el caso de las ayudas al carbón en el Estado español son competencia de Cañete y les ha remitido a él.

Tras la reunión, el alcalde de Langreo no pudo esconder su decepción y aseguró que "si los ciudadanos conocieran este tipo de actitudes, subirían los euroescépticos de manera exponencial". Sánchez afirmó que "la reunión ha sido un desastre y no me queda más remedio que decirle a mis vecinos que no esperen nada de la Comisión Europea, creo que ha quedado demostrado que este asunto está cerrado para ellos pero no tienen la valentía política de decirlo". Tras este análisis, el regidor langreano hizo una llamada a la movilización señalando que "o damos una vuelta a través de la presión o con la actual coyuntura política no hay alternativa ni políticas que vayan a cambiar esto". Por su parte, Aníbal Vázquez sostuvo que, en lo que respecta al carbón, "todo el mundo está escaqueándose", por lo que ha advertido que "si no nos dan una solución, no vamos a esperar impávidos a 2018 para que se acaben las ayudas sin hacer nada". El alcalde mierense subrayó que "no nos vamos a quedar mirando, lo único que estamos pidiendo es que nos digan que cierran y que nos den alternativas porque hay que cambiar el tejido industrial, no puede ser que lo que se firme en nuestro país se convierta en papel mojado, y no nos den ninguna alternativa".

Por último, José Luis Villares aseguró que lo ocurrido ayer en Bruselas, "es lo mismo que está ocurriendo con el Gobierno central, no es la primera vez que acudimos a una reunión donde tiran balones fuera y nos dicen que no es de su competencia, creo que hacen esto para que estemos dando vueltas y nadie nos diga la verdad". La minería, añadió, "está en la situación actual por los incumplimientos del Gobierno de España, tanto por culpa del PP como del PSOE, y el pasotismo de las instituciones europeas". Villares, como Vázquez y Sánchez, afirmó que de no cambiar nada en los próximos meses, "va a ver una explosión social porque son muchos los miles de trabajadores que van a quedar en la calle con un impacto inmediato en las comarcas mineras"