El patronato de la Fundación para el Progreso del Soft Computing decidió ayer la liquidación y extinción de la entidad, lo que supone el cierre total del Centro Europeo de Soft Computing asentado en el edificio de investigación del campus de Mieres y el despido de toda la plantilla. Una drástica decisión que pilló por sorpresa a los trabajadores, que no daban crédito a lo ocurrido. Poco tiene que ver con la idea original del patronato, que era poner en marcha un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que supondría la pérdida de trece puestos de trabajo, pero que apostaba por la continuidad del centro. De momento, esta es la única información que han recibido al respecto, desconociendo qué plazos se han marcado o qué ocurrirá con los compromisos vigentes que tiene el centro.
Sergio Damas, investigador principal del Centro Europeo de Soft Computing y uno de los representantes de la plantilla, destacó que la decisión de los patronos "es un despropósito", lamentando "que no nos hayan dado más información más allá de que tienen que buscar a alguien para que lleve a cabo la liquidación". La postura de los trabajadores, que se reunieron ayer en asamblea tras conocer la decisión del patronato, "es seguir apostando por el centro, somos conscientes de quién tiene la sartén por el mango y tendrían que dar las pertinentes explicaciones de su falta de apoyo, porque nuestro compromiso es seguir adelante con el trabajo, esto no puede quedarse en una liquidación sin más".
Los trabajadores ya iniciaron la semana pasada una ronda de contactos con los grupos parlamentarios en la Junta General del Principado para recabar apoyo. También con el Ayuntamiento de Mieres, donde mantuvieron un encuentro ayer antes de conocer la decisión del patronato. "En la Junta nos reunimos con el PP, IU, Podemos y Foro, todos nos mostraron su apoyo y se comprometieron a recabar toda la información que pudieran al respecto", afirmó Sergio Damas. Más de lo mismo en el Ayuntamiento de Mieres, donde se entrevistaron con todos los grupos, sin excepción, quienes acordaron una moción de apoyo institucional para el próximo Pleno. "Nos alegramos de que, en el caso del Ayuntamiento, no haya un color político en el apoyo, ya que se han sumado todos los partidos".
Nadie se esperaba que el patronato optase finalmente por liquidar la fundación que sustenta el Centro Europeo de Soft Computing. En su última reunión, el patronato aprobó por mayoría la puesta en marcha de un ERE que suponía el despido de trece de los veintinueve trabajadores que tiene el centro. Una dura medida, pero que tenía como objetivo la viabilidad del centro ubicado en el campus de Mieres, teniendo en cuenta su dramática situación económica. Días después, el consejero de Economía y Empleo, Francisco Blanco, defendió el apoyo del Principado al Centro Europeo de Soft Computing asegurando que, incluso, estaban dispuestos a incrementar su aportación económica. El Principado cuenta con cuatro de los diez puestos dentro del patronato, sin contar con el rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, que también es patrono. Liberbank, por su parte, cuenta con tres patronos, además de la presidencia. Los dos patronos restantes son el SOMA y CC OO.
Fundado en 2005
El Centro Europeo de Soft Computing se creó en 2005 con una aportación inicial de doce millones procedentes de fondos mineros, así como de Cajastur (ahora Liberbank) y el propio Gobierno regional. Estos dos últimos realizaron otros abonos adicionales que, en el caso del Principado, llegaron a los 1,8 millones además de recibir recursos de convocatorias regionales de I+D. El centro consiguió en este tiempo autofinanciarse en un 40 por ciento.
