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El Centro de Nanotecnología financia con fondos propios el 75% de su presupuesto

El CINN obtiene la mayor parte de sus recursos de contratos con empresas y proyectos de innovación

Una investigadora del CINN. F. R.

La autogestión gana protagonismo en el Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología (CINN) de El Entrego. La entidad -que tiene su sede central en el edificio tecnológico del pozo Entrego y cuentan con una planta de experimentación en el polígono de La Florida- cuenta para este año con una inversión estimada de 600.000 euros. Tres cuartas partes de esos recursos se obtendrán de los contratos y convenios de colaboración suscritos con empresas, así como de los fondos de proyectos de investigación nacionales e internacionales a lo que concurre el CINN. Sólo un 23 por ciento, 140.000 euros en total, proceden de las aportaciones directas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y del Principado.

El CSIC, el Gobierno regional y la Universidad de Oviedo son las tres entidades impulsoras del Centro de Nanotecnología, que tiene entre sus objetivos fomentar la investigación en nanomateriales y estimular la puesta en marcha de empresas de base tecnológica. El presupuesto de la entidad suele fluctuar de un año a otro, ya que depende en buena medida de los contratos con empresas y los fondos de proyectos de investigación por los que concursa.

"Para este año esperamos movernos en torno a los 600.000 euros, aunque la cantidad finalmente podría ser mayor", argumentó Ramón Torrecillas, director del CINN, para añadir a continuación: "Nosotros tenemos la ventaja de contar con una sólida colaboración con empresas que explotan los resultados de las investigaciones que realizamos". Otra de las vías de financiación es la obtención de fondos de innovación de proyectos como el plan Hymacer -impulsado por la UE con un presupuesto global de 1,8 millones- en el que el CINN participó junto al centro tecnológico IK4-Tekniker, en el País Vasco; la Universidad Católica de la ciudad belga de Lovaina; y cuatro empresas privadas de España, Alemania y Holanda.

Reparto

Las únicas aportaciones externas directas proceden del CSIC y del Principado. Cada uno de ellos contribuye con 70.000 euros. De los fondos del Gobierno regional, 30.000 euros se dedican a gastos de funcionamiento de las instalaciones del centro tecnológico de El Entrego. Buena parte de los recursos del CINN se destinan a pagar a los trabajadores. "Un 80 por ciento del dinero es para los gastos de personal, lo que impide dedicar más fondos a investigación", expuso Torrecillas, que el pasado verano ya pidió más apoyo al Principado, si bien reconoce que el actual contexto económico es "complicado".

El CINN, que desembarcó en su nueva sede del pozo Entrego a mediados del año 2014, ya ha rebasado la barrera del medio centenar de trabajadores, tras incorporar recientemente a cuatro jóvenes investigadores. En concreto, el centro ha alcanzado las 51 personas y está previsto que en los próximos meses se sumen al CINN otros tres científicos, con lo que se llegará a los 54 trabajadores.

La mitad de la plantilla actual está adscrita al CSIC y la otra mitad depende de la Universidad de Oviedo.

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