A Santa Cristina de Lena no le hacen falta retoques. La iglesia de Palacio de Felgueras, declarada Bien de Interés Cultural y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es el monumento del Prerrománico asturiano mejor conservado y el único templo de este movimiento artístico que no necesita obras. Así de taxativamente lo anunciaron los expertos que participaron en las Jornadas del Prerrománico asturiano, un encuentro organizado con la Viceconsejería de Cultura y Deporte del Principado para analizar la situación de los bienes patrimoniales de la región.
No es la primera vez que Santa Cristina, construida en el siglo IX, puede presumir de ser la mejor conservada entre sus iglesias coetáneas. Expertos de la Universidad de Oviedo publicaron hace cuatro años un estudio en el que destacaban que el templo estaba en mejores condiciones que el resto de monumentos del Prerrománico. Firmaron el documento los profesores Soledad Álvarez, Rosa María Esbert, Lorenzo Arias y Raquel Sáenz del área de Historia del Arte; junto a Francisco Díaz-Pache, Vicente García Rui, Ángel Rodríguez, Luis Suárez y Lope Calleja, del área de Petrología y Geoquímica. Un informe de la Unesco, en 2014, confirmó la buena conservación de todos los restos del Prerrománico asturiano.
Los monumentos no necesitan ninguna actuación urgente, según las conclusiones de las Jornadas del Prerrománico, pero hay obras pendientes. En San Miguel de Lillo es necesaria una intervención aislada en uno de los paneles de estuco con capa pictórica. En San Julián de los Prados, en Santullano, se ha confirmado un deterioro progresivo que ha avanzado en las últimas décadas. Está previsto que intervenga el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE). San Salvador de Valdediós tiene una deficiencia relacionada con la ventilación y Santo Adriano de Tuñón sufre por la presencia de fábricas en su entorno. El viceconsejero de Cultura y Deporte, Vicente Domínguez, confirmó en una visita a Lena que "Santa Cristina sólo necesita que se mantenga el control sobre algunos puntos para asegurar que su conservación siga siendo tan buena".
El templo lenense, por lo tanto, está fuera de la lista de actuaciones porque no necesita ninguna mejora. Santa Cristina se reformó por última vez en el año 2012. Entonces, la Consejería de Cultura invirtió 123.000 euros en la joya del Prerrománico de las Cuencas. La rehabilitación de la ermita se centró en las fachadas y en el tejado, que tenía goteras antes de la obra. Dentro del templo se instalaron tres zócalos para adornar unos vanos que se destaparon durante la actuación (de uno de ellos no había constancia documental) y que aportan, desde entonces, nueva luz y más ventilación al monumento.
El alcalde del concejo, Ramón Argüelles, alabó ayer el trabajo de los responsables del mantenimiento de la iglesia. Durante más de cuatro décadas, esa labor recayó en la guardesa Inés Faes. "Ella abría el templo cuando era necesario ventilarlo, antes de que se descubrieran los nuevos vanos, y veló muy bien por él durante todo este tiempo", aseguró el máximo dirigente local.
La iglesia recibe más de seis mil visitas al año. Es el segundo atractivo turístico del concejo, sólo superado por la estación de Valgrande-Pajares. La mayoría de los turistas llegan entre la primavera y verano. Es posible entrar dentro del templo, pero es necesario avisar con antelación y pagar una entrada. Este año, la Consejería de Cultura espera superar la cifra de asistencia porque el templo está presente en la autopista del Huerna (AP-66). Tras una larga reivindicación de hosteleros, vecinos y turistas, el Ministerio de Fomento autorizó hace unas semanas la instalación de señales para guiar a los conductores hasta el monumento. "Era una actuación muy necesaria, ya que todos los años se nos perdían turistas por el camino", afirmó Argüelles. Ahora, la joya del Prerrománico ya está al descubierto.
