La propuesta que planteó el candidato a rector de la Universidad de Oviedo, José Muñiz, de implantar en el campus de Mieres el grado de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (antiguo INEF) podría ser una salida para la maltrecha situación en la que se encuentran tanto las instalaciones deportivas como la residencia de estudiantes. Ambas instalaciones, inauguradas entre los años 2011 y 2012, se encuentran infrautilizadas y han obligado a tomar medidas para salvar su rentabilidad. En el caso de las instalaciones deportivas, se ha llegado a hablar de que el Ayuntamiento de Mieres asumiera su gestión, complementando al resto de instalaciones de este tipo que existen en el concejo. Sin embargo, poco se conoce sobre la tramitación que siguió al compromiso alcanzado por la entidad académica y la administración local. En el caso de la residencia de estudiantes, lo que menos tiene es, precisamente, estudiantes que habiten en estas instalaciones durante el curso académico. La solución, en este caso, ha sido su uso como alojamiento temporal de equipos deportivos.

Todo esto podría cambiar con el INEF. La carrera, que actualmente se puede estudiar en la Universidad de León, cuenta con una amplia demanda estudiantil. Tanta, que en la entidad académica leonesa cuenta con límite de plazas, dejando cada año a un buen número de aspirantes sin poder acceder a la carrera. El candidato José Muñiz aludía a que la implantación de este grado en Mieres podría captar a unos trescientos alumnos, un dato nada desdeñable teniendo en cuenta que el campus de Barredo cuenta en la actualidad con poco menos de un millar de estudiantes.

Pero, ¿están las instalaciones de Mieres capacitadas para acoger este grado? El complejo deportivo de Mieres cuenta con polideportivo, pista completa y módulos. También dispone de un completo gimnasio con máquinas de cardio y pesas, una sala polivalente y sauna. Además, en el exterior del edificio se ubican dos pistas de tenis, cuatro de pádel, un campo de fútbol 7 de hierba artificial y un circuito de carreras. Unas dependencias que nada tienen que envidiar a las que disfrutan los alumnos del INEF en León, que cuenta con sala polivalente, un pabellón polideportivo divisible en tercios, una sala de musculación, otra de gimnasia y una última de lucha, además de un rocódromo. José Muñiz había destacado que, dado que ya existen estas dependencias, la implantación del nuevo grado tendría unos costes mucho más reducidos que si se tuviese que empezar desde cero en otro campus. Por otro lado, la residencia de estudiantes también se vería beneficiada gracias a la alta demanda de este grado, y aliviando su actual situación.

Por otro lado, no es la primera vez que se alude a Mieres como un lugar de formación para deportistas. Y es que hace algunos años se habló de la puesta en marcha de un centro de alto rendimiento deportivo que llegó a contar con una partida dentro de los Presupuestos Generales del Estado, pero que acabó cayendo en el olvido. Concretamente, Mieres disponía de dos millones de euros de los presupuestos de 2010. Un centro que sí tiene la vecina León y para el que se acabaron invirtiendo doce millones de euros financiados al 80 por ciento por el Consejo Superior de Deportes, mientras que el resto se abonó entre el Ayuntamiento y la Universidad de León. Estas instalaciones, además, son aprovechadas por los alumnos del grado de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, implementando el atractivo de estos estudios con respecto a otras universidades del país donde también se imparten. Mieres perdió la oportunidad de contar con el centro de alto rendimiento deportivo, ahora queda por ver qué ocurre con la propuesta del INEF y si finalmente se convierte en una realidad que salve las instalaciones deportivas del campus.