"Queremos ayudar a las personas que lo están pasando mal", aseguró Carlos Costales García, bombero del parque de San Martín del Rey Aurelio, que partirá junto con otros integrantes de la asociación Brazos Abiertos Asturias para Grecia con el objetivo de desarrollar un proyecto de ayuda humanitaria a los refugiados que llegan al país heleno. En principio se trasladarán a la isla de Lesbos, aunque también barajan la de Chíos, para incrementar los dispositivos de salvamento marítimo existentes ante la llegada masiva de personas.

El colectivo se formó semanas atrás y ya ha contactado con ayuntamientos y con el Principado para solicitar ayuda. "Necesitamos 110.000 euros para montar el dispositivo", indicó el langreano Carlos Costales, que trabaja desde hace siete años como auxiliar de bombero en el parque ubicado en El Entrego y que está inmerso ahora, junto con el resto de integrantes de la asociación Brazos Abiertos Asturias, en los trámites para poner en marcha el proyecto. Unos primeros pasos de una labor que supone mucho trabajo, pero que afrontan "la ilusión de poder ayudar a los que lo necesitan".

A las ocho personas que echaron a andar la iniciativa se han unido, en las últimas semanas, más voluntarios que pretenden también viajar a Grecia para aportar su granito de arena. Entre ellos figuran bomberos, policías, socorristas, todos ellos con conocimientos y titulación en salvamento marítimo. El plan diseñado se basa en el desplazamiento de cinco personas en cada turno durante, en principio, seis meses. "Estaríamos entre 17 y 20 días cada relevo", señaló Carlos Costales. Tras la llegada de los primeros compromisos de respaldo económico de las instituciones, la asociación Brazos Abiertos Asturias ha decidido que, la próxima semana, se trasladen tres personas a Grecia para tomar contacto y organizar la llegada del dispositivo de salvamento.

"Queremos ir cuanto antes pero tenemos que asegurar y hacer las cosas bien", resaltó el auxiliar de bombero. Por el momento ya han mantenido contactos con las ONG desplazadas en las islas griegas y pretende suscribir un convenio con un colectivo vasco que ya opera allí. Carlos Costales considera que "hay mucha gente en condiciones lamentables y hay noches en las que llegan 50 botes a las costas". Las ONG que trabajan en la zona "no dan abasto y en verano, con mejores condiciones de la mar podría incrementarse la llegada de refugiados". El langreano subrayó que "hay que tener memoria", aludiendo "a la emigración española de otros tiempos".

Antes de partir los integrantes del contingente abordarán un curso de formación, del que formarán parte psicólogos. Tras dirigirse a diferentes ayuntamientos de la región, la asociación Brazos Abiertos de Asturias logró el respaldo de Langreo, que aportará 10.000 euros, y de Oviedo, que cederá un vehículo todoterreno para la intervención. También mantuvieron los primeros contactos con el Consistorio de Gijón, que acogió de forma positiva la iniciativa. "Les agradecemos a todos que confíen en nosotros", señaló Carlos Costales. Ahora, solicitarán financiación en entidades privadas.

Recurrieron además al Gobierno regional para que colabore en el proyecto de ayuda humanitaria a los refugiados e inmigrantes. Los voluntarios del colectivo dedicarán sus días de vacaciones a viajar a las islas griegas para ayudar a quienes puedan necesitarles. Su programa inicial apuntaba a la necesidad de contar con una embarcación de salvamento de ocho metros de eslora, un vehículo 4x4 y un remolque para la embarcación. Preveían cuando comenzaron a diseñar el operativo ocuparse de la cobertura de 5,6 kilómetros de costa de la isla de Lesbos, un 33% de la zona que está siendo patrullada por la ONG catalana Proactiva Open Arms aunque su destino final estará marcado por las necesidades del momento. Su misión será la de localizar a las embarcaciones y establecer las medidas oportunas para el desembarco seguro de los tripulantes en la costa griega. ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) calcula que a la isla de Lesbos han llegado entre enero de 2015 y el mismo mes de este año un total de 517.000 inmigrantes y refugiados. Durante el pasado año más de 3.700 personas fallecieron intentando cruzar el Mediterráneo para llegar a Europa. Además, según Brazos Abiertos Asturias una de cada tres personas que llegan actualmente a Grecia es menor de edad y muchos viajan sin la compañía de sus familiares.

El colectivo asturiano, que pretende convertirse en ONG, fue creada el pasado mes por un grupo de voluntarios que se puso en contacto con Proactiva Open Arms, que lleva seis meses trabajando en el mar Egeo. Brazos Abiertos Asturias dispone de una página web, "brazosabiertosasturias.org", donde explica cómo se puede colaborar con la iniciativa.