El peligroso charco de agua que se forma en la carretera entre Moreda y Boo tiene los días contados. Los operarios de la empresa Asfal Norte comenzaron ayer con las obras de drenaje y canalización de este bache, uno de los puntos más comprometidos de las comunicaciones por carretera en Aller.

El Gobierno del Principado se había comprometido con el alcalde de Aller para llevar a cabo los trabajos de restauración del tramo de la carretera. En un primer momento, se rebacheó la carretera, tapando el enorme socavón en el que se acumulaban grandes cantidades de agua. Sin embargo, esta actuación inicial no fue suficiente, ya la lluvia seguía provocando el peligroso charco para los conductores frente al campo de fútbol Federico Mulas, en la zona del Primero de Marianes. Ahora, en una segunda actuación, los operarios procederán al drenaje y canalización del agua.

La rehabilitación de la carretera entre Moreda y Boo es una vieja aspiración del concejo, que ya había incluido los trabajos en un gran proyecto de fondos mineros en el que además se incluían los accesos al polígono de Caborana. Sin embargo, con la supresión de los fondos mineros por parte del Gobierno, el proyecto se quedó en el aire.