La Corporación mierense acordó ayer solicitar al Arzobispado de Oviedo y al Gobierno del Principado de Asturias que arbitren las medidas y los medios necesarios para que "a la mayor brevedad se proceda a restaurar las bóvedas decoradas con pinturas del santuario de los Mártires Cosme y Damián". Todos los grupos políticos secundaron una moción presentada por el PP, remarcando el estado de deterioro que sufre el templo de Insierto, centro neurálgico de la romería de Los Mártires y uno de los principales referentes patrimoniales del concejo.
"El Santuario de los mártires Cosme y Damián es un bien inmueble de los más relevantes del Patrimonio Histórico de nuestro concejo, declarado como Bien de Interés Cultural, es decir, la máxima categoría de protección y, por ello, de dominio público", apuntó ayer José Manuel Rodríguez, portavoz del grupo municipal del PP. Y añadió: "Desde el Ayuntamiento, aun siendo conscientes de que se trata de una propiedad privada, no debemos permanecer ajenos a velar por su conservación".
La Corporación considera necesario "restaurar las bóvedas decoradas con pinturas y en la actualidad muy oscurecidas por efectos del incendio que desgraciadamente sufrió el Santuario hace unos años".
La cubierta de bóveda de cañón del santuario de Insierto se divide en tres tramos, separados por anchas arcadas que reposan sobre columnas prismáticas de piedra. Los dos primeros tramos se cubren con cúpulas de lunetos que aún conservan la pintura original. Esta pintura representa diversos motivos vegetales con sendos tondos en la intersección de las aristas, en el primero de los cuales se representan los signos del martirio.
