Cuatro mujeres y tres ejemplos de dinámicas eco-sociales con trasfondo local. Así se presentaron ayer en la Casa de la Cultura de Mieres María Fernanda Fernández, historiadora del arte; Ana Esther Velázquez, directora del IES Bernaldo de Quirós; y Carmen Estrada y María José González, del centro público de educación especial de Santullano. Las cuatro dieron su visión del medio físico-natural y del entorno humano-social durante la III Semana Social que organizaba la parroquia de San Pedro Apóstol de Mieres.

María Fernanda Fernández fue la encargada de romper el hielo hablando del patrimonio cultural. "Mantenerlo es una responsabilidad común para que las generaciones futuras puedan disfrutarlo", señaló, destacando que, normalmente, "vemos el patrimonio como una imposición, pero es algo positivo". También aludió la historiadora del arte a ejemplos positivos y negativos de la conservación del medio ambiente. Entre los primeros, citó la recuperación del socavón de La Rebaldana, "un ejemplo consciente de cuatro personas que decidieron recuperar este entorno y del que se beneficia todo el mundo". Fernández se abstuvo de poner ejemplos, aunque sí destaco que "son cosas grandiosas que se han hecho impuestas y hoy no tienen ningún uso". Sí citó a Hunosa, destacando que "se mueve por fines empresariales". Terminó animando a los presentes a que "seamos críticos con la conservación de lo que hemos heredado".

Más filosófica se mostró la directora del IES Bernaldo de Quirós. Ana Esther Velázquez habló de que el hombre "es esencialmente inadaptado, cambia el mundo para adaptarlo a sus necesidades". Destacó, además, que "a veces caemos en el ecologismo ingenuo al tratar de conservar espacios naturales vírgenes o entornos culturales" y "nos hemos convertido en agentes consumidores e individualistas, estamos desconectados de nosotros mismos, de nuestra interioridad, de la naturaleza que se convierte en paisaje". Su propuesta, como apuntó, "pasa por recuperar una triple conciencia, la sacralidad, el sentido de los límites y la casa común".

Las últimas en dirigirse al numeroso público que acudió a esta jornada de la semana cultural de la parroquia de San Pedro Apóstol de Mieres, fueron las docentes María José González y Carmen Estrada. Ambas explicaron el modelo de trabajo con los alumnos del colegio de educación especial de Santullano. "Un centro que respeta las diferencias y elimina las barreras de acceso a la información", destacó González, señalando que "nosotros nos adaptamos a cada uno de los niños". Explicó que el centro cuenta con 33 alumnos, 17 docentes, cuatro no docentes, cinco personas en comedor, cuatro cuidadoras de transporte y dos limpiadoras; y relató el proyecto educativo de señalización que desarrollan con éxito.