Casi una decena de apagones se han sucedido en el Hermanos Antuña en las últimas temporadas, algunos de ellos en partidos televisados. Esta situación ha provocado que la Federación Asturiana de Fútbol haya avisado al Caudal Deportivo de que la próxima vez habrá sanción. De los nueve apagones, dos provocaron el aplazamiento del partido y otros siete una suspensión momentánea.

En enero de 2011 comenzaba la maldición de las luces del Antuña. En aquel encuentro, el Caudal recibía, en Segunda B, al Alavés. Paradójicamente, la luz se fue con 2-0 para los locales, que se apagaron con las torretas, ya que el conjunto vasco remontó hasta el 2-3. Ese mismo año, con el Caudal de nuevo en Tercera División, el día de Santa Bárbara las luces volvían a dejar a oscuras el Hermanos Antuña en un partido ante el Candás. Tras unos minutos, se reanudó.

Casi un año más tarde, en octubre de 2012, y también en Segunda B, la luz falló en un partido ante el Real Oviedo, que finalmente fue suspendido, jugándose semanas después la segunda mitad. Esa misma temporada, y en enero de 2013, y con la Cultural como visitante también hubo de suspenderse el choque, aunque en este caso de forma temporal.

En marzo del pasado año se produjo el segundo de los aplazamientos, al irse la luz en mitad de un Caudal-Lenense de Tercera, que se terminó unos días más tarde. En verano, en Copa Federación, se fueron las luces en un partido ante el Sporting B, aunque ni siquiera se llegó a parar el partido. Peor fue en octubre, cuando Marino y Tuilla jugaban en Mieres la final de Copa Federación, que también se suspendió por las averías eléctricas del Hermanos Antuña.

Este mismo año, las visitas, consecutivas, del Tuilla y el Siero al Caudal se saldaron con sendas suspensiones de varios minutos.