Constancia, tenacidad y apoyo familiar. Estas son tres de las claves para poder iniciar una aventura empresarial. El negocio, eso sí, hay que trabajárselo, y la idea tiene que madurarse. "Siempre hay un nicho de mercado, pero hay que verlo", expuso ayer el empresario Néstor Martínez, de Vecamarti, compañía que fabrica recambios para el automóvil en Mieres. "Sol hay para todos, lo que hay que hacer es ubicarse y que te dé un rayito", añadió.

Martínez participó ayer en la charla "El emprendimiento y la educación empresarial. El ejemplo de Valnalón", un acto del Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas, organizado con motivo del vigésimo aniversario de la edición comarcal del diario. Junto a él estuvieron Marta Pérez, directora-gerente de Valnalón; Judith Naves, de la empresa de platos cocinados en conserva Astursabor; Stella Fuente, de la firma de moda Namuka; y Diego Rodríguez, del blog tecnológico iPhoneA2. Marta Pérez destacó la necesidad de contar con el apoyo familiar cuando se pone en marcha un proyecto, y puso como ejemplo lo sucedido con la propia charla. "Stella tiene a su madre en la tienda en Oviedo, y Judith, en su puesto de la feria de la Ascensión, a su familia. Este apoyo es importantísimo, si no, a veces pueden verse muy solos". Dos de las características que deben tener los emprendedores son la "constancia y la tenacidad", algo que según la directora de Valnalón, los cuatro empresarios de la charla cumplen.

Judith Naves tenía 21 años cuando se presentó en Valnalón, pero contaba con experiencia laboral y en el mundo de la empresa, porque sus padres son emprendedores del sector agroalimentario. Ella ha montado "una fábrica de conservas, hacemos platos cocinados con razas autóctonas de Asturias". Así, hoy mismo presenta en Caso dos nuevos productos, carne guisada de vaca asturiana de la montaña, guisada bien con cerveza Curuxera (negra), bien con cerveza Caleya ("más tostada, casi rubia"), lo que le da a cada plato un carácter distinto. Previamente ya comercializaba platos con oveja xalda -que cría su familia-, potro asturcón, gochu asturcelta, vacuno asturiana de los valles?

Lo más duro en su caso fue conseguir todos los permisos necesarios para abrir la instalación, ubicada en el mismo polígono de Valnalón. "Fueron 18 meses, con temas burocráticos complicados", sobre todo la tramitación de Medio Ambiente, que sólo para contestar a la petición da un plazo de entre 6 y 8 meses. La producción, que comenzó a desarrollarse hace seis meses, está enfocada a ser vendida en tiendas de alimentación de calidad.

Néstor Martínez comenzó con su empresa el 5 de julio de 2002, tras mucho tiempo preparando su desembarco a Asturias desde Argentina, donde su familia tenía empresas relacionadas con el mundo del automóvil. "Vine sobre todo por seguridad", explicó el empresario, que empezó en una nave de 350 metros cuadrados en Valnalón y ahora tiene 3.000 metros en Baíña (Mieres), donde fabrican hasta 3.000 referencias distintas de recambios para el automóvil (empezó con cables de frenos y embragues). Se ha especializado en desarrollar "series cortas", para todo tipo de vehículos, con una factoría versátil, en la que no se elabora cantidad pero sí el producto adecuado a cada petición, y con fiabilidad.

Reconoce que la manera de conseguir el capital inicial fue gracias al apoyo familiar, y afirmó que si bien en Asturias no ha tenido ningún problema, en comparación con Argentina, para poder emprender. Sí es cierto que ahora nota algunos problemas, como las diferencias fiscales entre territorios. "De Cataluña se van no por política, es por dinero. Los Gobiernos deberían ponerse de acuerdo para unificar la fiscalidad, no pagar unos más que otros por estar o no en Madrid". Martínez explica que, como es su caso, "siempre hay un nicho de mercado, pero hay que verlo. Sol hay para todos, lo que hay que hacer es ubicarse y que te dé un rayito".

Diego Rodríguez se vio en el paro y casi por casualidad convirtió su afición, la tecnología, en su trabajo. Recogió el testigo de un blog especializado en productos Apple que tenía 500 visitas al día, casi como pasatiempo al principio. Llegó un punto en el que, dedicándole tiempo, y metiendo un anuncio en la plataforma publicitaria de Google, el espacio generó 40 céntimos. "Me alegré muchísimo". Ahora "estamos en las 600.000 visitas mensuales. Es de las webs de habla hispana sobre Apple más vistas del mundo". Esto le ha permitido "tener un salario digno". Piensa seguir avanzando e invertir en remodelar y mejorar su "pequeño medio de comunicación especializado".

Por su parte, Stella Fuente se formó como diseñadora primero, y con administración y dirección de empresas después. Trabajó en una empresa, en ambos ámbitos, en Madrid, pero "quería ser valiente, montar una marca, dejar el trabajo... tuve miedo, miedo al fracaso, al que dirán por hacer dejado un empleo". Contó con el apoyo de su familia, empezó a hacer sus propios diseños y a venderlos bajo la marca Namuka. Ahora ha puesto su propia tienda, Namuka & Co. "Me di cuenta que hay gente como yo, que quiere sacar su producto". Dentro de su tienda alquila el espacio a diseñadores que empiezan como ella, y se vende su ropa. Hay gente de Barcelona, Bilbao o Madrid, y al principio "me costó convencer a la gente", pero se siente "orgullosa" de haber podido sacarlo adelante. Ahora, eso sí, está "pensando 24 horas en el trabajo, luchando constantemente".