El gran reto compartido pasa por crear empleo, fijar población, evitando que los jóvenes se tengan que marcha fuera a trabajar, y seguir avanzando en el desarrollo de infraestructuras y servicios que mejoren la calidad de vida de los vecinos.

El primero en entrar de lleno en el análisis de la situación actual fue David Moreno: "La reconversión se ha quedado a medio camino. El sector terciario ha ganado mucho peso en los últimos años, pero sigue faltando tejido industrial". El regidor socialista reconoce que Aller ha dado pasos firmes: "La red de carretas, salvo la conexión con Boo, está perfecta y la banda ancha se encuentra bastante extendida. Se han hecho equipamientos y el precio de la vivienda es competitivo". Moreno echa en falta los fondos mineros no ejecutados, "pese a estar firmados", pero también reclama un cambio de mentalidad: "Tenemos que aprender a creer en nosotros. En Aller el primer hotel que se abrió lo puso en marcha un valenciano. Necesitamos una mentalidad más emprendedora".

Ramón Argüelles tiene muy claro qué proyectos son en estos momentos prioritarios para Lena: "Tenemos dos necesidades urgentes, como son la construcción del nuevo centro de salud y el desarrollo del polígono de Villallana" . El dirigente de IU espera poder sacar adelante también la apertura de mina Julita, una explotación de carbón no subvencionado "que generará 40 empleos". El turismo y la bicicleta están siempre en la mente del alcalde: "Contamos con una gran escaparate que debemos saber rentabilizar".

Morcín ha visto en los últimos años florecer el polígono de Argame: "Es cierto que el proyecto no ha alcanzado las previsiones de empleo y estamos aún lejos de los 600 puestos planteados inicialmente, pero hay que valorar lo hecho en plena crisis económica", señaló Álvarez Barbao, que destacó la expansión urbanística de Santa Eulalia, donde actualmente residen cerca de mil vecinos. Además de pedir más suelo industrial, para el regidor morciniego es vital el arreglo de las carreteras MO-1 y MO-2, que unen la capital Santa Eulalia con los núcleos de Busloñe y Peñerudes, respectivamente. Unos viales que "tienen tramos infernales". Barbao reclamó un plan de accesos para el Monsacro con el objetivo de poder explotar turísticamente las capillas que coronan el emblemático monte.

El alcalde de Mieres fue el regidor que más énfasis puso en criticar la falta de compromiso del resto de administraciones con las Cuencas, canalizando un sentir general entre los regidores. "Si no cuentas con financiación nada puedes hacer. De nada sirve tener una empresa interesada en instalarse en el municipio si no dispones de suelo industrial urbanizado". Aníbal Vázquez considera que el Gobierno central "aún tiene una deuda sin pagar con las Cuencas". "En Mieres teníamos nueve pozos funcionando y ahora queda uno con apenas 300 mineros". Reclamó un "mayor compromiso" con el territorio y el desbloqueo de los fondos mineros del anterior plan, suprimidos en 2011: "Con ese dinero podríamos plantearnos recuperar una mínima parte de lo perdido, pero ahora resulta que no tenemos ni seguridad jurídica". Vázquez se mostró quejoso con los la escasa rentabilidad sacada al campus de Mieres tras una inversión de "22.000 millones de pesetas, que así se entiende mejor". No comprende que la Escuela de Minas no esté en Barredo por el rechazo de los profesores al traslado: "Yo, si en el pozo no iba donde me mandaban, ya sabía que acababa en casa".

Ana Díaz lamentó que en Riosa, tras el reciente cierre del pozo Montsacro, "ya no hay ninguna salida laboral". Los vecinos deben ganarse la vida: "El Angliru está muy bien y tiene mucho nombre, pero atrae un turismo de paso". La alcaldesa, tras un año en el cargo, ya conoce perfectamente los problemas a los que se enfrenta: "Necesitamos más ayuda del resto de instituciones". "El Ayuntamiento de Riosa no tiene una deuda, pero existe otra deuda, la que se tiene con los vecinos".