Los padres de Mieres velan armas contra el ajuste que busca implantar la Consejería de Educación en el transporte y que, hasta ahora, se ha aplazado por el rotundo rechazo de las comunidades educativas. Si el Principado sigue adelante, el próximo curso, los alumnos que vivan a menos de 1,5 kilómetros del centrto tendrán que pagar 0,90 euros por viaje. "Es atentar contra nuestros derechos", aseguró la presidenta del AMPA de Figaredo, Mari Flor Valtuiya. El centro abandera las quejas junto al Santa Eulalia de Ujo y el Villapendi de Turón. Empezarán una protesta mañana, con concentraciones ante los colegios y amenazan con acciones "más duras" si no tienen respuesta.

"Es una norma arbitraria, que no tiene en cuenta cómo es el camino ni el peligro que corren los niños al hacerlo a pie", destacó Valtuiya. Esa es una de las reclamaciones que llevan ante la Consejería: que se evalúe cada recorrido es una de las reclamaciones que tienen para la Consejería.

En Figaredo hay quince alumnos afectados: todos los que viven entre La Cortina y el colegio. Estiman que, en todo el concejo, hay medio centenar de escolares con el mismo problema. Antes de llegar a las movilizaciones, los padres intentaron contactar con el Consejero de Educación, Genaro Alonso. Les recibió el director general de Planificación, pero no les dio solución. El gobierno local (IU) les dio ayer su apoyo con un comunicado: "La reivindicación de los padres y madres es totalmente justa, pedimos a la Consejería que de respuesta y termine con la incertidumbre".