La excavación del falso túnel por el que circulará el tren una vez concluyan las obras de soterramiento de las vías de la antigua Feve en Langreo ya está en marcha. Los trabajos se iniciaron esta semana y concluirán en aproximadamente ocho meses.
La actuación se abordará desde cuatro frentes. Dos de las zonas están ubicadas en la recta de Valnalón, donde las excavadoras ya han comenzado a preparar el acceso al emboquille de uno de los frentes de ataque. Las rampas de salida y entrada del túnel son las otras dos ubicaciones en las que se pondrán en marcha también los trabajos de vaciado del paso subterráneo, donde ya se instalaron los pilotes.
En estas rampas se están construyendo ahora unos pórticos metálicos y de hormigón armado que servirán de apuntalamiento entre las pantallas de pilotes cuando se inicie la retirada de la tierra, según aseguró la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente. En esta primera fase trabajarán dos equipos de excavación en la recta de Valnalón (uno en cada frente) y cuando concluyan los trabajos en los pórticos de las rampas de entrada y salida se iniciará la actuación en esa zona. En principio, está previsto que se ponga en marcha en agosto.
En los próximos meses se extraerán 236.679 metros cúbicos de tierra del interior del túnel, que tendrá 1.790 metros de longitud. Los trabajos permitirán de vaciar el paso subterráneo, para soterrar el trazado de la línea Gijón-Pola de Laviana, pero también liberar los terrenos de superficie para configurar nuevos espacios urbanos.
Las obras de soterramiento comenzaron de forma oficial a finales de 2009 aunque hasta agosto los trabajos se centraron en tareas auxiliares, como el traslado de conducciones de servicios afectadas o la retirada de las playas de vías. La cimentación del falso túnel fue iniciada por la firma adjudicataria del soterramiento -la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Comsa y Contratas Iglesias- en el verano de 2010. Las máquinas perforadoras horadaron el suelo para introducir pilotes de dos tipos: impermeabilizantes y estructurales. Estos elementos componen las paredes de la galería que sostienen la losa. Las obras obligaron también a cortar el tráfico ferroviario de Feve en todo el valle durante seis meses aunque se restableció a principios de mayo.
