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Los ayuntamientos reclaman vigilancia para evitar expolios en la Vía Carisa

Lena, Aller y Villamanín piden a las delegaciones del Gobierno en Asturias y León más control en la zona para impedir daños durante los trabajos

Los ayuntamientos reclaman vigilancia para evitar expolios en la Vía Carisa

Los ayuntamientos de Lena, Aller y Villamanín quieren que los yacimientos de la Carisa estén a salvo. Los regidores de los concejos asturianos y del municipio leonés reclamarán a la Delegación del Gobierno que incremente la vigilancia en la zona para evitar los expolios durante los trabajos de los arqueólogos. La nueva campaña en el enclave empezará dentro de unos días, concretamente el 4 de julio, y se extenderá durante un mes. Los responsables municipales temen que el inicio de los trabajos sea un reclamo para los expoliadores arqueológicos.

Lena ya ha tomado las primeras precauciones. El alcalde del concejo, Ramón Argüelles (IU), anunció ayer que ha encargado a la patrulla de la Policía Rural que controle el lugar: "Incrementarán la vigilancia en la zona donde se encuentra el nuevo yacimiento", aseguró el máximo dirigente local. El posible tercer campamento romano de la Carisa está entre Aller y Lena, en el monte Carroceo (conocido popularmente como Carraceo). Las primeras hipótesis apuntan a que el lugar guarda un campamento de origen romano y de naturaleza militar. El recinto está atravesado por la Vía Carisa justo en el centro de la construcción.

La vigilancia del cuerpo de seguridad municipal no será suficiente. Es por eso que Argüelles acudirá a la Delegación del Gobierno en Asturias para recuperar un antiguo convenio de vigilancia con el Servicio para la Protección de la Naturaleza (Seprona). Según el regidor, "sabemos que hay patrullas que pasan asiduamente por el lugar, pero nos gustaría contar con un plan de actuación más concreto en el lugar de cara a la próxima campaña".

La vertiente asturiana quedaría así cubierta. La Vía Carisa está protegida como bien de interés cultural (BIC) desde el año pasado. Esta catalogación hace más difícil las agresiones, ya que los expoliadores cometerían un delito grave si causaran daños o sustracciones de restos en el lugar. "Esa protección ya nos da cierta tranquilidad", destacó Argüelles.

El segundo escenario para la investigación de este verano será la vertiente leonesa del Picu L.lagüezos. El monte, en el que limitan Lena y Villamanín, guarda la primera construcción romana que levantaron los legionarios en el territorio que actualmente ocupa Asturias. La zona asturiana ha sido investigada en dos ocasiones: la primera con financiación del ayuntamiento de Lena y la segunda, en 2012, a través de una campaña que sufragó la Consejería de Cultura, Educación y Deportes. Las dos campañas, al igual que la que está a punto de empezar, estuvieron encabezadas por la arqueóloga Esperanza Martín.

Las indagaciones en el lugar sirvieron para constatar lo que los arqueólogos ya suponían: el lugar guarda un yacimiento que sirvió como punto de vigilancia y fue uno de los lugares en los que se vertebró la romanización de Asturias. Conocer su magnitud era, hasta ahora, imposible ya que sólo se había investigado la vertiente asturiana.

Las buenas noticias para L.lagüezos llegaron en la primavera pasada, cuando la Junta de Castilla y León destinó a una campaña en la zona algo más de 4.000 euros. Los trabajos, con el respaldo del Ayuntamiento de Villamanín, han comenzado ya a través del desbroce del monte. La posibilidad de que el inicio de la actuación atraiga a los "buscadores" de restos arqueológicos también ha puesto en pie de guerra al regidor de Villamanín, José Luis García Oblanca.

"Los arqueólogos nos han expresado su preocupación porque se pudieran ocasionar daños en la zona, así que iniciaremos los contactos con la subdelegación del Gobierno en León para que incremente la vigilancia", anunció Oblanca, sumándose así a la iniciativa de los regidores asturianos. En este punto, destacó que "nuestro objetivo es trabajar de la mano y dar cada paso en el mismo sentido por el bien de la promoción del lugar".

Cada ayuntamiento suma a la campaña una aportación valorada en 3.000 euros, repartidos entre dotaciones económicas, recursos humanos y materiales. El presupuesto se completa con 4.000 euros habilitados desde el Principado, que se podrán destinar únicamente a la restauración de piezas que se recuperen en el enclave. El plan de trabajo ha arrancado ya con los desbroces en la zona, pero las labores arqueológicas no comenzarán hasta el próximo mes de julio. El equipo iniciará la investigación con una metalodetección en ambos enclaves (Carroceo y L.lagüezos). Están previstas excavaciones, pero aún no se ha decidido el lugar.

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