Elías Ortega, Sócrates Fernández, Álvaro Rodríguez Cuesta y Daniel Garduño, los cuatro mineros de la Hullera Vasco Leonesa que desde hace 16 días están encerrados en las entrañas del pozo Aurelio del Valle (Santa Lucía, Pola de Gordón), se declararon ayer en huelga de hambre. Lo hicieron contra el criterio del comité de empresa, que intentó hasta bien entrada la tarde convencerlos para que desistieran de una decisión que habían estado rumiando en solitario bajo tierra desde hace varios días.

"Nos parece una medida excesivamente dura, pero no hemos podido disuadirlos; nos han dicho que están decididos a quemar las pocas fuerzas que les quedan". Julio Gómez es el presidente del Comité de Empresa y uno de los compañeros que ayer estuvo con los encerrados intentando, sin éxito, que dieran marcha atrás. "Nos han pedido que saquemos toda la comida y que no les bajemos nada, se han quedado únicamente con unas botellas de agua", apuntó Gómez visiblemente preocupado.

Los cuatro mineros llevan encerrados en el pozo Aurelio del Valle desde el pasado 13 de junio para exigir el cierre ordenado de la explotación ante la difícil situación de la Hullera Vasco Leonesa. Si el Gobierno central no desbloquea una inversión de 20 millones de euros para esas labores, la mina quedará definitivamente cerrada el próximo 31 de julio. Los encerrados han resistido ya más de dos semanas a 200 metros de profundidad. Ahora, han querido ir un paso más lejos. "Físicamente están bastante bien -ayer pasaron revisión médica-, pero psicológicamente empiezan dar muestras de fatiga y se les ve el cansancio en la cara, sobre todo cuando se quedan con la mirada perdida", explicó ayer un entristecido Julio Gómez.

Los sindicatos han convocado para hoy una concentración de apoyo a los encerrados. Será a las siete de la tarde en la plaza de la iglesia de Ciñera.