El Museo de la Minería y la Industria de El Entrego (Mumi) empieza a salir del pozo. El centro cultural ha consolidado en el primer semestre del año el repunte de visitas que ya que detectó en el cierre del pasado ejercicio, después de que en 2014 registrara sus peores datos históricos de afluencia como consecuencia de la crisis y la caída de turistas en la región. En concreto, en los primeros seis meses del año pasaron por el Mumi 27.125 personas, unos 3.000 visitantes más que en el mismo período de 2015. "Hay que ser prudente, pero creemos que los más duro de la caída ya ha pasado y que ahora esa tendencia de está moderando y estamos en la senda de la recuperación", explicó Santiago González Romero, director del Museo de la Minería.
El equipamiento cultural cerró el pasado ejercicio con 57.395 turistas, después de que un año antes acabara con 56.148, la peor cifra de su historia. Incluso en el año de la apertura del equipamiento, en 1994, se había registrado un mayor volumen de visitas: 60.129. Con algunos altibajos, la afluencia mantuvo en los años siguientes una tendencia al alza, hasta alcanzar en 2007, justo antes de que comenzase la crisis económica, sus mejores resultados históricos, con 105.261 visitantes.
A partir de entonces el centro cultural entró en una espiral de caída. El año siguiente, 2008, ya se contabilizaron 92.144 turistas y en 2011 hubo 86.227. El descenso fue continuado hasta 2014, cuando se cayó por primera vez de los 60.000, debido a la crisis generalizada del sector turístico en la región y le pérdida de visitantes. Ahora parece que esa tendencia al alza apuntada en 2015, con 1.200 turistas más, se consolida e incluso que va ganando fuerza. "En lo que va de año tenemos acumulados unos 3.000 visitantes más que en los primero seis meses del año anterior y parece que empezamos a recuperar el terreno perdido; confiamos en seguir creciendo en la misma línea", esgrimió González Romero.
De los 57.395 visitantes que pasaron por el centro cultural de El Entrego en 2015 un total de 30.988 vinieron en grupos, mientras que 26.407 correspondieron a visitas individuales. Los ingresos propios derivados de la actividad mercantil del museo han ido ganando peso en los últimos años en las cuentas del Museo de la Minería. La venta de entradas y los rendimientos generados por la tienda concentraron el pasado año el 79,7 por ciento del presupuesto, el porcentaje más elevado desde que el complejo cultural abrió sus puertas, en 1994. En concreto, se ingresaron 250.574 euros por la venta de entradas, 53.255 por los beneficios de la tienda y 11.404 por la máquina expendedora de comida y bebidas
El 20,3 por ciento restante procedió de aportaciones externas, del Principado y de la firma Maxam: 90.000 y 36.610 euros, respectivamente.
Pese al descenso en el número de visitantes al Museo de la Minería, que ahora recupera el pulso tras unos años de caídas constantes, lo cierto es que el turismo minero y patrimonial está en auge en la comarca. En 2013 abrió el Ecomuseo del Samuño, con su tren minero. El verano pasado, además, comenzaban las visitas guiadas al interior del pozo Sotón, que había mantenido su actividad hasta finales de 2014.
