"No han retrocedido, van en serio y buscan acabar con los servicios públicos". La concejal responsable de Emutsa, Delia Campomanes, se mostró ayer desconfiada una vez que el Ministerio de Hacienda ha rebajado el duro tono con el que inicialmente solicitó la "liquidación" de la empresa de autobuses. "Ahora dicen que lo que querían era información, pero lo que pidieron es el acta plenaria que decretaba el cierre de la compañía", puntualizó la edil de IU. Además, pidió a la ciudadanía que se mantenga "alerta" ante la posibilidad de que se tengan que convocar movilizaciones.

El pasado jueves, coincidiendo con la celebración con una reunión extraordinaria del consejo de administración de Emutsa, unas 300 personas se concentraron frente al apoyo. Fue un gesto casi espontáneo, ya que la protesta se convocó con una apenas horas de plazo. Y es que la misiva que inicialmente envió el equipo del ministro Cristóbal Montoro ordenaba el cierre de Emutsa, servicio que el año pasado atendió a 768.458 usuarios. Es más, Hacienda fue aún más lejos al pedir que de manera urgente, en un plazo de quince días, se notificase un acuerdo plenario que certifique la liquidación de la compañía pública. El problema radica en que el año pasado el Ayuntamiento tuvo que inyectar en la compañía 750.000 euros, por lo que el Ministerio la considera deficitaria y, por tanto, fuera del marco que recoge la ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local. Este duro planteamiento inicial ha cambiado. Hacienda sostiene, ahora, que lo que solicita es "información" sobre el estado, en este caso, de Emutsa.