Más vigilancia policial en el centro de Moreda. Esa es la receta que ha encontrado el Ayuntamiento de Aller para terminar con los problemas de aparcamiento en la localidad. El Gobierno local (PSOE) descarta la reordenación del tráfico que se había planteado. Los responsables municipales consideran que resultaría "muy costosa" y no solucionaría los problemas actuales: estacionamientos en doble fila que convierten las calles en carreras de obstáculos, zonas de carga y descarga llenas de vehículos no autorizados y protestas de propietarios por la ocupación de accesos regulados por vados.

La regulación del tráfico, propuesta hace ya más de una década por primera vez, incluía un cambio radical en la circulación por las calles de Moreda. Principalmente por la calle de La Estación y la Avenida Tartiere, que dejarían de ser calzadas de doble sentido para convertirse en accesos en sentido único: la primera para los vehículos que circularan en dirección Moreda-Oviedo, y la segunda para el sentido contrario.

El objetivo era ganar plazas de aparcamiento en fila pero el alcalde, David Moreno, considera que "no alcanzaríamos esa meta, ya que el principal problema que tenemos es que los vecinos quieren aparcar en el centro y muy cerca del lugar al que se dirigen". El número de plazas que generaría la reordenación no cubriría la demanda actual.

La situación es caótica a diario pero los viernes, con la celebración del mercado semanal, Moreda se convierte en una jungla con asfalto. "Nuestra labor ahora es reeducar a los conductores para que aprendan a aparcar donde se puede", señaló el regidor. Lo dice con conocimiento de causa ya que, en los últimos años, se han generado varias bolsas de estacionamiento en la localidad de Moreda: en la plaza del pozo San Antonio, en Campera y en Sotiello. Más de doscientas plazas que no tienen todo el uso que el Ayuntamiento quisiera. Los conductores siguen optando por las viejas prácticas.

El parking de Campera está a unos 300 metros del centro. Los mismos que separan el núcleo de la localidad del pozo San Antonio, unido al entorno del centro de salud a través de una pasarela. Así las cosas, Moreno considera que la única solución pasa por una mayor vigilancia policial: "No queremos incrementar las sanciones, estamos hablando de una campaña de civismo para que los conductores comprendan que el coche no puede quedarse siempre en la misma puerta", destacó el Alcalde.