El cierre del telesilla del Cuitu Negru para la próxima temporada de esquí sigue generando controversia. La Plataforma Pro Pajares -constituida hace un par de meses y formada por más de una veintena de colectivos que incluyen a hosteleros, concesionarios de los negocios de las estación, esquiadores e incluso a los ayuntamientos de Lena y Villamanín- está dispuesta a llevar sus demandas hasta las calles. Los portavoces del colectivo aseguraron ayer a LA NUEVA ESPAÑA que comenzarán con un calendario de protestas antes del inicio de la temporada de esquí si el Principado no da marcha atrás en sus planes de clausurar un remonte que entienden como "la columna vertebral de la estación".
"Vamos a esperar a que pase el verano y a que se debata en la Junta General la iniciativa presentada para evitar el cierre del remonte", explicaron los portavoces. Sin embargo, si la opción política -han recibido apoyos de la mayoría de grupos parlamentarios- no prospera, tendrán que intentarlo por la vía de la protesta. "Esperamos no tener que llegar a eso, pero, si es necesario, todos estamos de acuerdo en tomar las medidas que sean adecuadas para que el Cuitu Negru no se cierre", indican desde la Plataforma Pro Pajares.
El Principado comunicaba el pasado mayo su decisión de clausurar el remonte, que tiene casi medio siglo de vida y es el más veterano de la estación. "Tras casi 50 años, al tener que hacer una revisión de más de 300.000 euros, además de otros trabajos, los técnicos fueron los que pusieron encima de la mesa que la mejor opción era cerrar el telesilla", explicaba entonces José Ramón Tuero, director general de Deporte, que sin embargo abría la puerta a que la silla se pudiera usar internamente para el transporte de material.
La Plataforma no piensa igual. "La estación está construida en torno a ese remonte e invertir 300.000 euros para que pase la revisión mientras que se busca una solución para mejorar los remontes de la estación es la única salida para que Pajares no se hunda", afirman los portavoces del colectivo, que han calculado una pérdida de usuarios del 40% si finalmente se cierra el remonte.
