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El refugio de Brañagallones aborda las últimas reformas para abrir este mes

El Principado ejecuta los trabajos de mejora de la instalación eléctrica en el equipamiento casín, que ya tiene reservas para este verano

Dos montañeros pasan junto al parador de Brañagallones. FERNANDO RODRÍGUEZ

El Principado apura las últimas obras en el parador de Brañagallones para su apertura como refugio de montaña antes de que finalice el mes. Sólo restan los trabajos para mejorar el sistema eléctrico y la calefacción después de que se abordasen obras en la traída de agua y en el interior de las dependencias. En los últimos días se instalaron las literas, que fueron elaboradas por un artesano de Tanes, y con ellas finaliza la colocación del nuevo mobiliario.

Estos remates concluirán en breve y ya entonces podrán abrir las instalaciones ubicadas en Caso, antes de que finalice el mes si no surge ningún inconveniente, según aseguraron fuentes regionales. La Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Montañismo de Asturias (Fempa), encargada de gestionar el refugio de montaña, ya tiene reservas.

"Hemos percibido mucho interés a pesar de que aún no se ha promocionado al estar en obras", aseguró Antonio Alba, miembro de la directiva de la Fempa, que añadió que el colectivo ya ha recibido llamadas de personas interesadas en alojarse en el refugio y cuentan con reservas para este verano. El guarda del refugio, José Manuel Prado, ya ha iniciado su trabajo en las instalaciones de Brañagallones y ya pernocta allí a la espera de que finalicen los últimos remates y lleguen los primeros montañeros.

El Principado ha invertido 50.000 euros en las obras necesarias para la reapertura de las instalaciones que funcionaron previamente como hotel de tres estrellas. Aunque el parador permaneció cerrado seis veranos consecutivos y éste se inicia sin que se haya puesto en marcha. En estos últimos años, la empresa que gestionaba el equipamiento reclamó al Principado que ejecutase obras de reparación pero no se llevaron a cabo y la concesión administrativa terminó ya el pasado año.

La Federación de Montaña presentó un proyecto para convertir el edificio en refugio de montaña, que recibió el visto bueno del Principado. El alcalde de Caso, Tomás Cueria, respaldó una iniciativa que considera que servirá para incrementar las visitas al parque natural de Redes.

Tanto el regidor como la entidad que gestionará el refugio de montaña reclaman mayor accesibilidad ya que actualmente sólo pueden circular vehículos autorizados en la pista de doce kilómetros que separa el núcleo de Bueres de Brañagallones. Por eso, solicitan a la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Autóctonos que permita el paso a todos los vehículos en los primeros 2.000 metros del camino de acceso al refugio.

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