La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La otra cara del turismo rural

Los apartamentos de Zureda, inaugurados en 1993 como un proyecto pionero del Principado, llevan casi un lustro cerrados y están muy deteriorados

Daños en el tejado de la vivienda independiente que completa el alojamiento.

Hay otra cara para el turismo rural. Y es la cara que muestra la localidad lenense de Valle de Zureda. Hace unas semanas, Taramundi celebró los treinta años de la apertura del primer establecimiento que aprovechó el "tirón" turístico de los pueblos: una efeméride marcada por la inauguración del hotel La Rectoral, abierto en 1986. El alojamiento despegó a buen ritmo, pero el Principado no tuvo tanta suerte con el innovador proyecto que puso en marcha en Lena. El núcleo rural Valle Zureda, formado por once apartamentos completos, se inauguró en el año 1993 y lleva casi un lustro cerrado. Hay ventanas rotas, puertas que no cierran y la maleza cubre un patio que se había reservado para las barbacoas al fresco de la tarde. El Principado tiene previsto ponerlos a la venta, según los vecinos.

La inauguración de los alojamientos rurales de Zureda se celebró, en primavera del año 1993, por todo lo alto. Acudieron representantes del entonces gobierno regional, ya que el Principado invirtió en su construcción ochenta millones de pesetas (unos 480.000 euros). Once apartamentos en un mismo edificio, que recrea las construcciones tradicionales asturianas. Balcones con barrotes de madera, portillas de hierro y ventanas con marcos marrones que, ahora, ya no lucen. Los vecinos de la zona aseguran que no se han cometido actos vandálicos en el lugar, sólo que "la falta de mantenimiento está destrozando los inmuebles poco a poco".

El núcleo turístico, que se completa con otra casa independiente rehabilitada, lleva casi un lustro sin actividad. Totalmente clausurado está desde el año 2012, aunque en los últimos tiempos de actividad apenas prestó servicio: "Había turistas llamando para reservar y se les decía que estaba ocupado, cuando no era así", afirman los vecinos del pueblo lenense. Temen que los inmuebles se vengan abajo con el paso del tiempo porque, según critican, "aquí nadie viene ni a ver cómo están ni qué reformas necesitan".

Preocupados por la situación del inmueble, acudieron al Principado. Según su versión, los responsables regionales tienen previsto enajenar todos los bienes que forman el núcleo rural de Valle Zureda en los próximos meses. Los trámites para la venta, afirman en la localidad, ya están en marcha.

El primer paso será un cambio de titularidad del edificio: de la Consejería de Empleo, Industria y Turismo a la Consejería de Hacienda, que tiene competencias para poner el inmueble a la venta. Lo que reclaman ahora desde la localidad es que el proceso de venta se acometa con "transparencia" para enterarse del concurso público: "Quizás algún vecino esté interesado en estos inmuebles para la puesta en marcha de un proyecto", señalaron.

Algunos ya lo han intentado, sin éxito. La asociación Pividal, formada por vecinos jóvenes de la zona rural de Lena, presentó un proyecto hace ya varios meses para reabrir las instalaciones. La entidad proponía destinar el inmueble a la puesta en marcha de un centro de formación y encuentro para promover la mejora de la vida en el campo. Ese es, a juicio de los vecinos, el mejor destino posible para las instalaciones: "A estas alturas ya no creemos que el turismo rural pueda ofrecernos nada. Esa idea, en Valle, ha fracasado". Lo dicen ellos y se ve en una fachada a la que ya le faltan algunas piedras.

Compartir el artículo

stats