Numerosas personas, vecinos y amigos acudieron ayer hasta el tanatorio de Moreda para dar el último adiós a Juan Ramón Suárez, Juan de Monín, que falleció el pasado martes tras ser embestido por un toro en La Tabierna. Con su fallecimiento, desaparece uno de los últimos vaqueros de alzada, que llevaba más de setenta años conduciendo su ganado hasta el puerto y asentándose en su cabaña desde principios de junio hasta que las primeras nieves se dejaran ver en los picachos de las montañas de alrededor anunciando el fin de la temporada de pastos. Durante esa larga estancia en la montaña, era habitual que excursionistas, cazadores y montañeros se acercasen hasta su cabaña, siempre impregnada por el olor a café, para degustar esta gratificante bebida que les ayudaba a recuperar fuerzas para proseguir el camino.

Juan de Monín también era un hombre solidario con las causas que afectaban al colectivo ganadero del concejo. Así, colaboró con la construcción de una traída de aguas hasta las cabañas, y acudió hasta el Ayuntamiento en numerosas ocasiones para solicitar asesoramiento y ayuda para proseguir la construcción de la pista del puerto Baxo, que ya llega a La Valencia y que próximamente llegará a La Tabierna, donde fue encontrado el ganadero el pasado martes. La familia, cumpliendo el deseo del finado, trasladará sus cenizas a La Tabierna para que pueda reposar eternamente al lado del fresno que hay en uno de los laterales de su huerto de su cabaña.