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Los vecinos de Las Ubiñas exigen "cerrar la puerta" al paso de la línea Sama-Velilla

Los pueblos de la zona protegida en Lena alegarán si el nuevo plan gestor, pendiente de negociar al anularse el anterior, permite la red de alta tensión

Torretas de una línea de alta tensión en Pajares. J. R. SILVEIRA

Los vecinos de la vertiente lenense del parque natural de Las Ubiñas-La Mesa exigirán que el nuevo plan de gestión del espacio protegido cierre la puerta a la línea de alta tensión Sama-Velilla. El documento actual deja la puerta abierta a los "cambios y refuerzos" en tendidos actuales. La lucha contra este polémico proyecto se acordó en un encuentro mantenido por los vecinos, tras saber que el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) había anulado el documento actual. Un fallo que ahora obliga a renegociar las condiciones con la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales.

Los vecinos de la parroquia rural de Páramo (Teverga) presentaron el recurso contra el documento. Enumeraron quince argumentos, que incluían presuntos incumplimientos en la tramitación, vulneraciones de la Constitución y distintas leyes. El juez sólo admite una alegación: la falta de una memoria económica adecuada.

La representante vecinal del parque natural en Lena, Auri Villar, aseguró ayer que "nosotros también estamos de acuerdo en este punto. Es necesaria una memoria clara para poder gestionar el territorio protegido". La situación actual obliga al Principado a retomar un proceso que, a todas luces, será largo y farragoso. La negociación empieza ahora desde cero, aunque los vecinos confían en que se mantengan los puntos del acuerdo en los que ya hay un acuerdo.

Habrá un plazo de alegaciones. Y en ese momento, los vecinos de Lena tomarán la palabra. "Ya hemos mantenido una primera reunión en la que hemos acordado que nuestra máxima reivindicación será que cierren la puerta de una vez a la línea de alta tensión Sama-Velilla o cualquier otro proyecto de electrificación". La sombra de este polémico proyecto planea sobre el parque natural desde que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en 2013, propusiera una nueva alternativa al tendido por el corredor de Pajares.

Los vecinos velaron armas entonces y amenazaron con protestas un año después. Fue entonces cuando la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales incluyó en el instrumento de gestión una cláusula que los inquietó: la construcción de nuevos tendidos eléctricos de alta tensión era "un uso prohibido en todo el ámbito del parque, debiendo sustituirse la creación de nuevos tendidos por el refuerzo y cambio de tensión de los ya existentes". La firma del gobierno local en el documento también generó polémica en el concejo.

"Hay que cerrar de una vez esa puerta que quedó entreabierta", aseguró ayer Villar. Con ese objetivo unirán fuerzas todos los pueblos de la zona protegida en Lena ya que, según la representante vecinal, "es la alegación que presentaremos todos de forma conjunta". Pero no la única porque, afirmó Villar, "cada pueblo presentará luego sus propios argumentos".

Villar reconoce que, en la anterior negociación, "no estuvimos demasiado atentos a los plazos y se nos quedaron reclamaciones en el tintero". Un error en el que no volverán a caer: "Estamos ya preparándonos y estaremos muy pendientes del periodo de alegaciones", zanjó la representante vecinal.

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