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El segundo plan de derribos de Langreo afecta a 40 edificios y llega a la zona rural

El Ayuntamiento quiere intervenir en La Felguera, Barros, Vega y El Visu, y en el viejo cuartel de la Guardia Civil si sus dueños no lo hacen antes

La calle Sánchez Cabricano de La Felguera, en la que pretende intervenir el Ayuntamiento de Langreo. FERNANDO RODRÍGUEZ

El Ayuntamiento de Langreo tiene previsto acometer el derribo de 40 edificaciones en ruinas con los 100.000 euros consignados para este capítulo en los presupuestos municipales de este año. Se trata de la segunda fase del plan de demoliciones. La primera, que se dará por finalizada este mes, afectó a trece inmuebles y se concentró en la zona urbana. Esta nueva fase se extenderá a la zona rural. El Consistorio tiene previsto detraer de esta partida el dinero necesario (unos 50.000 euros) para derribar el antiguo cuartel, en caso de que el Ministerio de Interior y Sogepsa no atiendan los requerimientos realizados. Tanto en el caso del cuartel como en el de las otras edificaciones en ruinas, el Ayuntamiento se haría cargo de los costes, para después repercutirlos a los propietarios de los inmuebles.

Jonatan López, concejal de Urbanismo de Langreo, expuso que la adjudicación de los derribos se hará en un único lote, con la intención de llegar al máximo número de edificios posible. "Tenemos 100.000 euros y la previsión es que se puedan demoler unas cuarenta viviendas. En esta segunda fase también actuaremos en la zona rural", manifestó el concejal langreano, para añadir a continuación: "Queremos intervenir en zonas como El Visu, el barrio de El Puente, Vega, Barros y la calle Sánchez Cabricano de La Felguera".

Por otro lado, en el caso de que la Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de la Seguridad del Estado (Giese), entidad dependiente del Ministerio del Interior, y la Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo (Sogepsa) no atiendan los requerimientos realizados por el Ayuntamiento para demoler el antiguo cuartel de la Guardia Civil, el Consistorio haría uso de los fondos del segundo plan de derribos para ejecutar el derribo. "Según nuestros cálculos serían unos 50.000 euros. Después se haría una modificación presupuestaria para reponer ese dinero, de forma que el montante global de la partida no se viera afectado y pudiéramos realizar todos los derribos proyectados", argumentó el concejal de Urbanismo.

El Consistorio prevé culminar a lo largo del presente mes la primera fase del plan de demoliciones, que afecta a trece construcciones y se inició el pasado abril. La inversión en estas obras ha sido de 56.365 euros. La empresa adjudicataria del plan, Pro Nalón S. L., redujo el presupuesto de licitación en un 25 por ciento. Otras siete empresas concurrieron al proceso para ejecutar los derribos proyectados.

El Ayuntamiento persigue un doble objetivo con el plan de demoliciones. Por un lado se pretende garantizar la seguridad, pero también se busca una mejora estética de los espacios urbanos en los que están las edificaciones afectadas. La actuación se ha centrado en inmuebles que sus propietarios no han demolido tras ser apercibidos por el Ayuntamiento. El Consistorio se ha hecho cargo inicialmente de los gastos, pero estos costes serán reclamados a los dueños a partir de ahora.

En el mismo entorno de La Felguera en el que quiere intervenirse con el plan de derribos también se está planteando la posibilidad de aplicar una serie de medidas que favorezcan el uso de naves y espacios industriales que actualmente se encuentran en desuso. Se pretende generar nueva actividad en estos espacios y mejorar su impacto estético.

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