La gerencia del área sanitaria VIII, que engloba a todo el valle del Nalón, se gasta anualmente 130.000 euros en electricidad. Eso sin contar el hospital ni otros sistemas calefactores como el gasoil o el gas natural que también están instalados en centros de salud y consultorios periféricos. Para reducir este consumo y mejorar en eficiencia, la gerencia ha llegado a un acuerdo de colaboración con la hullera estatal Hunosa para poner en marcha un proyecto de gestión energética eficiente y sostenible.

La compañía realizará una auditoría energética en 19 inmuebles que identificará y evaluará las distintas oportunidades de mejora en la reducción de emisiones de dióxido de carbono al ambiente, priorizando cada una de las medidas. De este modo, se busca explotar de forma óptima los potenciales ahorros detectados. El gerente del área sanitaria VIII, Tácito Virgilio Suárez, destacó que la medida "es mucho más que rebajar la factura energética, supondrá un cambio cultural, una inversión en salud". Y es que, como apuntó el responsable sanitario, "queremos prevenir la herida medioambiental, que está apareciendo poco a poco y tiene mucha relación con las alteraciones del medio ambiente".

La presidenta de Hunosa, María Teresa Mallada, destacó la relevancia de este contrato, señalando que "nos dará la posibilidad de implementar los estudios con obras reales". Y es que una vez finalizada la auditoría, Hunosa ofrecerá sus servicios energéticos al área sanitaria VIII adaptándolos a sus necesidades. Por eso, Mallada no descartó que sistemas como el de la geotermia de agua de mina, que ya se ha desarrollado con éxito en el hospital Álvarez Buylla de Mieres, pueda llegar a los centros de salud del valle del Nalón.

El contrato para la auditoría tiene un coste de 14.460 euros y será entregado antes del 31 de diciembre de este año. Después la gerencia tendrá que analizar las propuestas de la hullera.