La parcela de Nitrastur no está contaminada por completo. Hay terrenos en la zona que, según un reciente estudio de la Universidad de Oviedo, están listos para ocupar. Esta es una de las conclusiones del proyecto europeo I+DARTS, financiado a través de los fondos LIFE y ejecutado por la Universidad, en colaboración con el Principado y SOGENER. El responsable del plan, que buscaba nuevas fórmulas de descontaminación de suelos a través del uso de técnicas naturales, es el profesor José Luis Rodríguez Gallego. No hay ningún plan para esos terrenos ahora mismo y tampoco se ha recibido ningún requerimiento del Principado. Limpiar por completo la parcela no será fácil ya que Iberdrola, propietaria de 122.000 metros cuadrados en una superficie total de 200.000, asegura que sus actividades no contaminaron el suelo.
Nitrastur cerró en 1997 y, desde entonces, ha sufrido un gran deterioro. Ha sido parcialmente demolida y, actualmente, está en estado de abandono. La parcela está ubicada entre Barros y La Felguera. La superficie con una mayor concentración de tóxicos alcanza los 70.000 metros cuadrados, tal y como revela el estudio de la Universidad.
El proyecto I+DARTS estudia un posible destino para los terrenos. Para Rodríguez Gallego, el "uso idóneo" sería convertir parte de la parcela en una zona de esparcimiento. "Aprovechando su pasado industrial, lo más conveniente sería la creación de un parque que aunara pasado y futuro", explicó. Además de mejorar la apariencia de la parcela, el citado uso "no supondría ningún riesgo para los visitantes, ya que no estarían en contacto con los elementos contaminantes". En ningún caso incluyen en el proyecto la puesta en marcha de un plan residencial.
El proyecto I+DARTS está ahora centrado en estudiar el presupuesto para la descontaminación de los suelos que han servido como muestra en el estudio: principalmente El Tarronal (Mieres) y Nitrastur (Langreo), los dos en las Cuencas. No manejan una partida presupuestaria en concreto, pero ya saben que las cantidades a destinar serán elevadas.
En el caso concreto de Nitrastur, puede tener un coste de "varios millones de euros", cantidad que se vería "sensatamente reducida" con la aplicación de los métodos naturales que se han estudiado en el proyecto I+DARTS. Se compararon hasta siete tecnologías y, algunas, dieron muy buenos resultados. Fue el caso de la fitoextracción asistida (uso de plantas para remover metales desde el suelo, transportarlos y concentrarlos como biomasa). Esa técnica biológica puede ser útil por sí misma en las zonas de más baja concentración de contaminantes. Tendría que combinarse con procedimientos físicos-químicos en lugares de máxima concentración de tóxicos.
La descontaminación completa de la zona, por tanto, no parece disparatada a los expertos. Consideran que la urgencia de los proyectos depende siempre de "el interés que despierten los terrenos en las administraciones o el conjunto social". En este punto, Nitrastur está en un mejor posición que El Tarronal de Mieres. "En el caso de la parcela de Langreo, hay cierto interés. No es el caso de El Tarronal, en una zona prácticamente despoblada", reconoció Rodríguez Gallego.
El problema estriba en la búsqueda de responsabilidades. Por el momento, los responsables de Iberdrola ya dejan claro que no asumirán los trabajos. El nuevo delegado institucional de Iberdrola en Asturias, Juan Cifuentes, aseguró en una entrevista a LA NUEVA ESPAÑA que la compañía "no ha realizado ninguna actividad contaminante es ese suelo". Además dejó claro que "no hay ningún plan para esos terrenos ahora mismo y tampoco hemos recibido ningún requerimiento del Principado". Otra parte de los terrenos, alrededor de 50.000 metros cuadrados, son de la compañía Regisa.
Responsables del Principado anunciaron, durante la presentación del I+DARTS, que El Ayuntamiento de Langreo ha reclamado en múltiples ocasiones la limpieza del suelo, sin recibir respuesta. El Consistorio había estimado la descontaminación en cuatro millones de euros. Una cantidad que podría reducirse considerablemente, a través de la aplicación de los nuevos procedimientos del proyecto I+DARTS. También en vistas de los resultados de las últimas mediciones de la Universidad de Oviedo, que apuntan a una amplia extensión de firme sin un nivel alarmante de tóxicos.
