Dentro de las jornadas gastronómicas que se convocan en la comarca del Nalón, las dedicadas a la trucha y al pitu caleya que hoy comienzan en diez restaurantes del concejo de Sobrescobio, en el Parque Natural de Redes, Reserva Mundial de la Biosfera, tienen amplia popularidad en el Principado de Asturias. El concejo es "alma y agua de la tierra" y a sus encantos paisajísticos y naturales que en otoño son un placer para la vista suma todo el año una gastronomía de calidad que tiene una de sus mejores referencias en las Jornadas de la trucha y el pitu caleya que a partir de hoy ofrecen en Anzó los restaurantes La Puerta de Arrobio y El Merendero de Anzó; en Rioseco, Don Félix, El Balcón de Redes, La Casona de Rioseco, Asador La Vega y Bar lo de María; en Ladines, Bar La Plaza, y en Soto de Agues, El Fresnu y La Plaza Soto. Son diez opciones para comer muy bien.

Las jornadas gastronómicas cumplen 21 años de plena aceptación y el menú que mantiene el importe de los últimos años, 20 euros comensal, incluye la sopa de curruscos, truchas fritas, pitu caleya, postre de la casa, con pan, vino y agua. Todo ello rico, rico, como corresponde a la popularidad y el prestigio de quien atiende en los fogones de las casas de comida del concejo.

La sopa de curruscos es un clásico en la zona alta del Nalón y preparación para lo que se come después. Las truchas, fritas, de aguas dulces, tienen carne muy sabrosa, tanto las pescadas con caña como las que se crían en piscifactoría, que son las que se encuentran en los mercados.

Bien fritas, como las sirven en la hostelería del concejo coyán, son un placer para el paladar de los comensales que asistan a las jornadas y que a continuación disfrutarán del auténtico pitu caleya preparado a la manera tradicional. El pitu caleya se alimenta de maíz y trigo natural y su vida se desarrolla en el mundo rural en plena libertad. Este pitu tiene una carne sana y natural y en Sobrescobio quienes están al frente de las cocinas hosteleras lo miman para conseguir un plato de excelencia. El postre casero, especialidad de cada establecimiento participante y lógicamente el pan, vino y agua completan una comida recomendable en Sobrescobio, en unas jornadas que impulsa el Ayuntamiento dentro de la promoción turística de un concejo que tiene mucho que ver pues es paisaje prodigioso, pleno de vida, donde la tierra, el hombre y la naturaleza conviven en ar­monía.

Las jornadas están anunciadas por un cartel del que es autora la niña Violeta Quer, de 13 años, y vecina de Madrid, elegido entre 60 carteles diseñados por otros tantos niños en el taller de pintura celebrado en agosto dentro del Programa de Actividades Culturales del Ayuntamiento y son la comunicación para este fin de semana acudir a Sobrescobio, donde "la tierra, tal como era" y el buen comer apuesta por los sabores tradicionales