Una caída de un muro tendrá consecuencias para 1.400 vecinos de Mieres. Las obras para reparar el derrumbamiento de un talud en la antigua AS-112, cerca de Valdefarrucos, ocasionarán desde hoy cortes del agua potable en catorce localidades del concejo. Los cortes serán ininterrumpidos o intermitentes, según el ritmo que marquen los trabajos, en Santa Cruz, Barrio San Salvador, Collanzo, Los Pontones, Sovilla, Grameo, Grillero, Santa Bárbara, Bustiello, Oriella, La Barraca y Los Figares. Suman, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), cerca de 1.400 vecinos. Además, también se verán afectadas las zonas más altas de Ujo y Figaredo.

Las obras para reparar el muro comenzarán hoy. La carretera es de titularidad regional y los operarios del Principado serán los encargados de acometer los trabajos. El tráfico queda cortado, por el momento, con la alternativa del Corredor del Aller (AS-112). "Aún es pronto para fijar un plazo para la vuelta a la normalidad, ya que el ritmo de estas medidas lo marcarán los trabajos", señaló ayer el vicealcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez.

Los cortes del agua potable comenzaron ayer por la noche y se mantendrán "por causas de fuerza mayor y hasta nuevo aviso", señalaron fuentes municipales. Los daños en la red de abastecimiento se produjeron porque el derrumbe del muro tuvo lugar justo en una zona de paso para una tubería de la red de abastecimiento del concejo. Quedó totalmente descubierta.

El principal núcleo afectado es Santa Cruz, con todos los pueblos y barrios que lo rodean. Suman, según el INE, más de 1.200 vecinos. En Ujo y Figaredo, aunque no es seguro que se produzcan cortes, habrá una notable disminución de la presión.