El gobierno de Mieres (IU) anunció ayer que incluirá en el presupuesto para el próximo año (2017) una línea de ayudas para el pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). Este nuevo programa esta dotado con 50.000 euros. Los portavoces municipales explicaron que la iniciativa formará parte de "un paquete de medidas anticrisis que incluirá el nuevo presupuesto municipal, cuya elaboración ya se está ultimando".

El gobierno local trabaja en estos momentos en los detalles de esta nueva línea de ayudas, que estará dirigida a apoyar a las familias y personas mayores que tengan menos recursos, por lo que habrá un límite de renta para poder solicitarlas. La cuantía quedará fijada en función del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) y también se tendrá en cuenta el número de miembros de la unidad familiar.

"El Alcalde fijó tres grandes objetivos políticos para esta legislatura: apostar por el empleo, proteger a los más débiles frente a la crisis y acabar de poner orden en el Ayuntamiento y es en estas líneas en las que trabaja el gobierno local", señalaron ayer los portavoces del equipo de Aníbal Vázquez. Y añadieron: " La puesta en marcha de esta ayuda al pago del IBI es un ejemplo, pero no el único. En este sentido, cabe recordar que las ordenanzas fiscales ya contemplan una importante batería de medidas para proteger a las familias con menos recursos y las personas mayores con pensiones bajas". Por ejemplo, las personas cuyos ingresos no superen el salario social básico estarán exentas de las tasas de agua, recogida de basuras y alcantarillado. En el caso de que superen el citado salario social, pero sus ingresos sean inferiores al IPREM, tendrán una bonificación del 60% en esas tasas y quienes no superen 2,5 veces el IPREM estarán exentas del pago mínimo facturable por prestación del servicio de alcantarillado. Además, también hay una exención total del pago del servicio de ayuda a domicilio cuando la renta familiar per capita anual de la unidad familiar no exceda del 100% del IPREM.

El gobierno local también comunicó hace unos días que en 2017 congelará las tasas. El impuesto que en principio podría experimentar un sensible encarecimiento es el IBI, debido a los afectos de la revisión catastral abordada hace dos años. La subida es difícil de cualificar debido a las singularidades de cada zona.