La colaboración entre las áreas sanitarias de los valles mineros, que desde la inauguración del nuevo hospital de Mieres se ha reforzado al contar este centro con equipamientos punteros, ha vivido su último capítulo hasta la fecha con el servicio de ginecología. De hecho, el doctor Ángel Sánchez del Río, jefe del departamento en el Álvarez-Buylla de Mieres, ya pasa consulta en el hospital Valle del Nalón durante algunas jornadas.
Es precisamente el servicio de ginecología del Álvarez-Buylla uno de los más valorados por las pacientes. No en vano, muchas futuras madres de otras áreas sanitarias acuden a Mieres a dar a luz por las técnicas y la calidad del servicio que ofrece el centro sanitario mierense. Lo hacían ya cuando todavía funcionaba el antiguo hospital de Murias, y lo siguen haciendo con la entrada en servicio, hace dos años, del inmueble de Nuevo Santullano.
El centro hospitalario mierense se ha convertido en referencia también por los equipamientos con los que cuenta. Primero fue una silla especial para partos, totalmente anatómica y que se adaptaba a la paciente para su mayor comodidad durante el alumbramiento. Un equipo que ya había en el viejo hospital. El traslado trajo consigo un nuevo "regalo". Y es que el centro referencia del Caudal cuenta desde hace algo más de un año con una bañera especial para favorecer la dilatación antes del parto. Con el agua se permite que las gestantes tengan, de una forma natural y sin medicación, un menor dolor durante la fase de la dilatación.
