Un informe de la Consejería de Medio Ambiente revela que el asfalto apilado en Oñón, procedente de la obras de la A-66 y que el gobierno local de Mieres quería reaprovechar en la ejecución de arreglos de carreteras locales, es contaminante. Así lo aseguró ayer el presidente de la gestora PSOE de Mieres, Hilario Feito, quien afirmó que "supone una gestión nefasta por parte del equipo de Gobierno de IU, ya que además de que este material no servirá para nada, va a tener un coste excepcional para los mierenses al tener que trasladar estos escombros a una planta de tratamiento".

La portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento, Gloria Muñoz, criticó el proceso seguido y denunció que desde IU "nunca se nos aportó la información necesaria que pedíamos". Por ello, los socialistas solicitaron a la Consejería de Medio Ambiente acceder al expediente sobre los residuos de Oñón. "El nombre del expediente, que es 'Gestión irregular de residuos de construcción procedente de las obras de la A-66' ya deja muy claro por donde van los tiros", aseguró Muñoz y agregó que la investigación del Principado se inició el 11 de agosto, con una toma de muestras de los apiles de asfalto en Oñón. "El análisis elaborado por los técnicos regionales de esas muestras revela que hay materiales contaminantes, entre ellos aceites y gases, y que los residuos no se pueden utilizar para otras obras y deben ser trasladaos a una planta de tratamiento", explicó la responsable socialista mierense. En concreto, el informe apunta a que el material acopiado es "no inerte, contaminante pero no peligroso".

Además, Gloria Muñoz destacó que el gobierno local no cumplió desde el principio con ninguna de las dos premisas exigidas por el Principado: un informe sobre le tratamiento de residuos de la empresa que cedía el material al Ayuntamiento de Mieres y la petición de autorización de uso por parte del Consistorio.

Además, la edil socialista desveló que el propio gobierno mierense encargó un informe propio que presentó al Principado el pasado 27 de octubre y cuyo dictamen concuerda con los análisis del material que hicieron los técnicos regionales. "El documento, que vimos en el expediente de Medio Ambiente, y no porque nos lo haya facilitado el gobierno local, revela que los residuos no pueden ser reutilizados para otras obras como pretendía IU".

Por último, el concejal Eduardo Martín, que realizó un seguimiento del material desde su acopio en Oñón, exigió al equipo de Gobierno mierense conocer los costes que supondrá el traslado a la planta de tratamiento del material, así como el del informe. Además, se preguntó si el plan de renovación de carreteras en los pueblos que preveía realizar con este asfalto sigue en pie o se va a cancelar.