Los trabajadores de la fábrica de MIeres Tubos retomaron ayer las movilizaciones con un corte de carretera en la vieja carretera de Castilla (N-630).

El corte de la calzada se produjo a las diez de la mañana. Los trabajadores bloquearon la glorieta que da acceso tanto a Baíña como a Cardeo, un núcleo de comunicaciones con alta intensidad de tráfico debido a que también sirve de enlace con la autovía Oviedo-Capomanes (A-66). De hecho, antes de proceder a la protesta, colgaron una gran pancarta del puente bajo el que pasa la citada autovía.

Numerosos vehículos apoyaron haciendo sonar el claxon a los trabajadores. En lo que se refiere al corte de la carretera, se prolongó por espacio de unos quince minutos.