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Hunosa prepara dos pozos para su posible explotación más allá de 2018

La inversión de cinco millones para acceder a capas de carbón en Carrio y Nicolasa deja abierto el mantenimiento de la actividad si cede la UE

Pese a las directrices actuales de la Unión Europea, que fijan el cierre de las explotaciones de carbón no competitivas el 31 de diciembre de 2018, Hunosa parece haber tomado el camino de preparar algunos de sus pozos para un futuro más a largo plazo. Al menos eso se desprende tanto de las palabras de su presidenta, María Teresa Mallada, como de las acciones que está tomando a cabo la compañía minera en materia de inversiones. De hecho, durante el presente año, la compañía ha contratado trabajos para la preparación de nuevas capas de explotación tanto en el pozo Carrio (Laviana), como en el San Nicolás -Nicolasa- (Mieres).

La máxima responsable de la hullera pública visitó ayer el puente del pozo Carrio, rehabilitado por la hullera, y por el que todavía pasan los vagones de carbón. Una reparación de la que Mallada, dijo, espera que sirva para que el puente siga operativo muchos años más. Algo que deja entrever las intenciones de la compañía estatal, pese a que posteriormente, cuestionada por si hay una decisión firme de ir más allá de 2018 con la explotación de carbón, se diera mus: "Por el momento sólo hablo de lo que tenemos firmado en el plan de empresa y acordado con los sindicatos, y eso es que el 31 de diciembre de 2018, el pozo Carrio va a estar abierto". Nada dijo del 1 de enero de 2019, pero las opciones de continuar están sobre la mesa.

Las inversiones durante este ejercicio han sido cuantiosas. Y es que han supuesto casi cinco millones de euros en labores de acondicionamiento para acceder a nuevas capas de carbón en dos de las tres explotaciones que permanecerían abiertas aún el 31 de diciembre de 2018: Carrio y Nicolasa. En el caso de la explotación lavianesa se han invertido 1,07 millones, aunque el grueso del dinero se lo ha llevado el pozo mierense, con 3,9 millones de euros. La intención de la compañía es tener listos los yacimientos para, si hay posibilidad o cambios en la normativa europea, se pueda seguir explotando carbón. De hecho, en el plan de empresa de Hunosa se refleja, respecto al cierre paulatino de explotaciones, que tanto Carrio, como Nicolasa, así como el pozo Santiago, estarán abiertos "el 31 de diciembre de 2018", por lo que no fija una fecha de clausura. Algo que sí hace con María Luisa, el otro pozo que aún queda operativo, que tiene próxima la finalización de su explotación.

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