"El ser humano dispone de una farmacia completa en el cerebro". Así lo aseguró el doctor José Antonio Flórez, Catedrático de Ciencias de la Conducta de la Universidad de Oviedo, en la charla titulada "Fármacos de la felicidad", que tuvo lugar en la Casa de Cultura de Pola de Lena, una actividad que contó con la colaboración del Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

José Antonio Flórez basó su exposición ante el público asistente en la siguiente ecuación: "felicidad=salud". Y a partir de esta premisa, sostuvo la tesis de que "las personas felices son más longevas y viven mejor", pues existe constancia científica de que los pensamientos positivos, el sentido del humor y la ayuda desinteresada a los demás estimulan sustancias químicas radicadas en el cerebro que actúan como protectores contra las enfermedades.

"Estamos jugando constantemente con nuestra salud. Hemos de ser más responsables y generar fuentes de felicidad", alertó el doctor Flórez, que lamentó que la sociedad moderna, a pesar de todos los medios que tiene a su disposición, caiga en la preocupación, la angustia y la infelicidad, y avisó de que "el camino hacia la felicidad no es sencillo, no se recorre con cosas sino mediante la voluntad de cambio y el propósito de lograrlo. Porque la felicidad es el principio de la vida, a lo que estamos destinados los seres humanos, pero de lo que tan a menudo huimos".

Y es que los problemas, el negativismo y la actitud pesimista frente a la vida, afectan directamente al sistema inmunológico y a la tensión arterial, que es causa directa de graves enfermedades, como por ejemplo la depresión y el deterioro cognitivo. "Hay personas que se enferman a sí mismas por el modo en el que viven, por los pensamientos que tienen. De ahí nace la necesidad de realizar un esfuerzo personal de cambio, para poder llevar una vida más larga y sana" expuso el doctor Flórez, que afirma que "existe constatación científica de que pensar positivamente incrementa la actividad de las denominadas células NK, que son las encargadas de mantener a raya a virus y bacterias". Por ello, José Antonio Flórez llamó a los asistentes a luchar contra el estrés familiar, pues "la familia, que tiene que ser el centro de salud, a veces es la causante de la enfermedad. El estrés familiar, que lo sufre el 40 por ciento de los niños, acaba produciendo hipertensión arterial, infarto y accidentes cerebrovasculares".

La receta

Así pues, ¿cuál es la receta? Apunten: el sentido del humor y la risa, son unos excelentes fármacos para combatir el colesterol, la hipertensión, la depresión, el estrés y la ansiedad; una buena dosis de pensamientos positivos previene el envejecimiento patológico, controla la acción de los antioxidantes y es el mejor cosmético para tener un mejor aspecto físico; practicar la ayuda desinteresada a los demás, como medio de sentirse útil y activo y, por último, trabajar en la búsqueda de la paz interior para conservar el cerebro en mejor estado posible y prevenir demencias. Todo ello está a su disposición en la farmacia que tienen dentro de la cabeza.

El acto protagonizado por el doctor José Antonio Flórez contó con la colaboración de la Universidad de Oviedo, la Fundación Ramón Areces y Caja Rural de Asturias, además del Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.