La localidad allerana de Cabañaquinta acogió ayer el certamen ganadero más importante del año en el concejo, la feria conocida popularmente como El Mercaón. Como es habitual la afluencia a la cita otoñal fue notable. Así, concurrieron más de un millar de cabezas de ganado.

Desde primera hora de la mañana centenares de personas recalaron en Cabañaquinta, tanto en transporte público como en vehículos particulares, para disfrutar de la feria del Mercaón, que desde hace décadas es, junto a la fiesta de San Martín, una de las celebraciones más concurridas del concejo de Aller. La capital allerana fue ayer centro de reunión tanto en el ferial de ganado como en los establecimientos hosteleros, que desde primera hora ofertaron las jornadas de los callos, el pote asturiano, la carne guisada, el lomo y picadillo, junto con caldos calientes que sirvieron para combatir el frío que dejó la helada nocturna.

El balance

En el recinto de ganado se dieron cita alrededor de setecientas cabezas de vacuno y otras trescientas de caballar, junto con medio centenar de cabras y gallinas de la raza asturiana. Los tratantes quedaron satisfechos con la actividad comercial, siendo el caballar el que mas acusó la subida de los precios dada su calidad. En este sentido, hubo compradores llegados desde el País Vasco, Navarra, La Rioja e, incluso, de algunas zonas del sur de Francia. También acudieron a Cabañaquinta ganaderos de León ,Valladolid o Cantabria. En cuanto al vacuno, los que menos duraron en exposición fueron los xatos pasteros, que alcanzaron precios desde los 600 a los 900 euros, según calidad.

Las vacas con buen porte también generaron expectación. Destacaron dos ejemplares presentados por David Díaz, de Felechosa: La Muralla y La Montaña, las dos asturianas de los valles, alcanzaron los seis mil euros. Ambos ejemplares tienen cinco años y se presentaron sin cría. Con precios similares fueron vendidas otras apreciadas vacas de Casomera y Collazo, que se fueron para Grado. Quien, gracias a tantos de años de servicio, sigue batiendo marcas en lo referente al número de ejemplares trasladados al Mercaón es el allerano de Casomera, Jesús Ordóñez Mallada, "Chusín el tratante" . En esta ocasión desplazó a Cabañaquinta mas de un centenar de cabezas de vacuno, entre xatos y vacas, vendiendo mas del ochenta por ciento de los ejemplares.

El mercadillo

En los exteriores del recinto ferial de Cabañaquinta el público pudo disfrutar de un amplio mercadillo, con herramientas y productos de todo tipo que contribuyeron a generar un gran ambiente en la localidad, hasta las primeras horas de la tarde, donde el protagonismo pasó a los comedores de bares y restaurantes, que se abarrotaron siendo muchos los que se acercaron a otras localidades próximas a degustar los callos que sirvieron siete establecimientos de todo el concejo, haciendo que la fiesta se siga disfrutando el resto del día.