Lleno a rebosar en el salón de actos de la Casa de la Cultura de Mieres en la presentación de libro "Mieres años 80 y 90", del fotógrafo local José Ramón Viejo. El acto contó con la colaboración del Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas. La cuidada puesta en escena tuvo su inicio media hora antes con la inauguración de la exposición fotográfica patrocinada por la Asociación Cultural y Minera "Santa Bárbara", en la que el visitante puede disfrutar de antiguas fotografías de Mieres en gran formato, un recorrido a través de la historia en la que se perciben los grandes cambios experimentados. La exposición incluye también objetos y curiosidades del pasado. Para la ocasión, en la entrada, a modo de hermosa introducción, se formó una escolta de vehículos clásicos.

Abierto el acto de presentación, José Ramón Viejo hizo referencia a la importancia que han tenido las redes sociales en la recuperación de su afición a la fotografía. "Las redes tienen una inmediatez que te hace ver cuándo una foto funciona, emociona, y recibes en cuestión de minutos la opinión y el cariño de la gente". Viejo, que desde hace cuatro años administra la página de Facebook "Mieres años 80 y 90", en la que publica diariamente una nueva fotografía, expresó su agradecimiento tanto a los colaboradores en la elaboración del libro como al numeroso público presente, y explicó que "el libro se circunscribe al periodo en que me iniciaba en el mundo de la fotografía", recordando su etapa como fotoperiodista "en un tiempo en el que en Mieres se estaban produciendo grandes cambios y tuve la suerte de darme cuenta y de fotografiar cosas que estaban a punto de desaparecer".

A continuación, Viejo cedió el turno de palabra al historiador Ernesto Burgos, "el mejor charlatán de Mieres" en palabras del fotógrafo, con quien comparte desde hace años tertulia dominical en el entorno de la plaza de abastos. Burgos, que reconoce haber aprendido a ser charlatán en la escuela de la plaza, realizó un ágil recorrido salpicado de anécdotas por la historia mierense de las décadas 80 y 90, "cuando lo que se produjo fue el desmantelamiento, no la reconversión que nos vendieron, porque para reconvertir ha de sustituirse algo por algo, y en Mieres no se hizo nada". El historiador rememoró personajes y situaciones "de los tiempos en que el cielo estaba siempre brumoso y sucio por las calefacciones de carbón" y recordó la plaga de la droga que asoló Mieres en aquellos tiempos. Por último, Burgos, conocedor del intenso trabajo que ha supuesto a Viejo la elaboración del libro presentado, se despidió agradeciendo a su autor "la impagable labor de recuperación de la historia gráfica de Mieres, porque, por más palabras que pueda escribir, una foto de Viejo siempre será más descriptiva".