Generar electricidad gracias a la red de agua. La Consejería de Empleo, Industria y Turismo ha dado luz verde al Ayuntamiento de Mieres para la instalación en el depósito de La Herradura, principal punto de abastecimiento de agua del casco urbano, de una planta piloto de generación hidroeléctrica. El proyecto contempla conectar esta infraestructura a la red eléctrica, para aprovechar la energía que se consiga gracias a la fuerza de la caída del agua en el depósito. Los planes municipales, en última instancia, pasan por lograr un ahorro en la factura eléctrica de los vecinos.
La planta piloto permitirá el aprovechamiento hidráulico de un caudal de agua que es canalizado a través del citado depósito a una velocidad de 0,33 metros cúbicos por segundo. La zona de aprovechamiento se situará, en concreto, entre la cámara de rotura de carga de Villandio y La Herradura. El transformador contará con una tubería aérea en la mayor parte del desnivel de caída. Se conseguirá un salto de 32,5 metros, según recoge el proyecto autorizado por el Principado.
Será necesario construir un pequeño depósito de descarga sobre el que se colocará, mediante estructura metálica prefabricada, una turbina tipo Francis de 92,5 kilowatios. Estará directamente acoplada a un generador asíncrono trifásico. La instalación incluirá igualmente un edificio en el que se ubicará un transformador "12/0,4 kv de 160 kva", así como los elementos de maniobra de potencia, protección, medida y control. La interconexión a la red de distribución eléctrica para posibilitar la evacuación de la energía producida por la central experimental se realizará mediante línea subterránea de 12 kilovoltios. Bastará con un circuito de 160 metros de longitud para lograr la conexión de ambas infraestructuras.
Los permisos
El pionero proyecto que impulsa Mieres se ha puesto en marcha tras recibir el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC). De esta forma, el Ayuntamiento ha logrado encauzar una actuación en la que lleva trabajando casi tres años. El sistema, en principio, producirá entre 0,3 y 0,08 megavatios por hora que serán vertidos directamente a la red en lugar de utilizarla para el aprovechamiento interno, originando de este modo una reducción en la factura. De momento, el gobierno local de IU no baraja cifras concretas de ahorro para los hogares, pero estiman que el resultado será "significativo". De todos modos, habrá que esperar hasta el último momento para conocer si finalmente se puede verter la producción a la red de distribución. Ahora bien, los estudios previos realizados por los servicios técnicos señalan que se trata de la mejor opción y los gestores municipales trabajan con esa planificación.
Se vierta a la red o no, el Ayuntamiento de Mieres saldrá ganando con el cambio porque el proyecto no le cuesta un sólo euro. El Consistorio sólo interviene como futuro beneficiario del equipamiento, asumiendo su coste las empresas que forman parte del consorcio. Esta entidad está formada por la Fundación Prodintec como entidad tecnóloga; Servo Ship, fabricante de los dispositivos; Ingeniería de Manutención Asturias (Ingemas), que se encargará de la instalación; y la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN), que asume la validación del sistema. De los 1,7 millones de euros que cuesta la iniciativa, 718.363 euros proceden de la Unión Europea al enmarcarse en el programa europeo "Life+". El objetivo final de los promotores es utilizar este proyecto piloto como lanzadera para comercializar el producto, de ahí que no tenga coste para el Ayuntamiento mierense.
Tras una primera fase de informes, el consorcio que impulsa el proyecto inició hace meses la toma de mediciones con la instalación de caudalímetros y nanómetros, lo que ha permiten obtener un historial del caudal y la presión del agua. Ahora toca abordar la fase de construcción de las infraestructuras necesarias para poner en funcionamiento el sistema. La explotación deberá empezar antes de dos años.
