-¿Adónde vas?

-Patatas traigo.

Este pequeño diálogo ejemplifica perfectamente lo ocurrido entre el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia, con los sindicatos mineros. Las centrales enviaron una misiva reclamando una reunión para analizar el estado del cumplimiento del Plan del Carbón, y exponiendo sus exigencias. La respuesta del representante del Ministerio de Industria nada tiene que ver con lo reclamado por las centrales, y se limita a "agradecer su disposición a continuar formulando y a impulsar conjuntamente todas las propuestas que ayuden de forma eficaz al desarrollo de las comarcas mineras y a establecer las bases para el futuro del sector". Es decir: desoye las reclamaciones del sector, y ni reunión, ni reivindicaciones.

Representantes de los sindicatos FICA-UGT y CC OO de Industria presentaron, personalmente, su carta en las instalaciones del Ministerio de Industria el 24 de noviembre. Unos días después, con fecha de 5 de diciembre, el secretario de Estado de Energía respondía. En su misiva Daniel Navia transmite su "máximo interés" por "abordar el futuro de los trabajadores y empresas del sector de la minería del carbón y el desarrollo alternativo de las comarcas mineras", pero no concreta ninguna reunión, ni ofrece fechas para que se produzca.

Las exigencias de los sindicatos incluían la aplicación del 7,5% del "hueco térmico" (la generación de energía) para el carbón español, la puesta en marcha del mecanismo de incentivo a la compra de mineral nacional, el céntimo verde, el "urgente impulso" económico a las Cuencas y la necesidad de "conocer al detalle una desconocida medida de ayuda estatal destinada a financiar el cierre de unidades de producción de carbón. A estas reclamaciones, el secretario de Estado de Energía se limita a expresar que este organismo y las centrales "comparten los principales ejes de actuación en torno a los que se ha venido trabajando", como son "el refuerzo del sistema de protección de los trabajadores, mediante ayudas por prejubilaciones y bajas indemnizadas", la "búsqueda de fórmulas que permitan impulsar proyectos alternativos para las comarcas mineras y una minería competitiva" y "ayudas a las empresas mineras para compensar sus pérdidas, cuya cuantía en 2016 será de 10 euros por tonelada de carbón producido".