Más de doscientas personas asistieron al homenaje tributado a la catedrática de Lengua y Literatura y directora del IES Bernaldo de Quirós, Carmen Díaz Castañón, fallecida hace 22 años. El acto, organizado por la Asociación Cultural Camín de Mieres, tuvo lugar en el auditorio de la Casa de la Cultura y contó con la colaboración del Ayuntamiento de Mieres y el Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas.

Actuó como presentador el miembro de la asociación organizadora Sergio Gutiérrez, que introdujo el vídeo de la ceremonia celebrada esa misma mañana en el cementerio mierense, "un acto emotivo y melancólico, cargado de simbolismo y poesía".

A continuación, la catedrática de Filología Inglesa, M.ª Luisa García, leyó la carta remitida por su compañero José Ramón San Miguel en la que se resaltaban los méritos de Díaz Castañón, discípula de Menéndez Pidal, y que fue capaz de llevar al Bernaldo de Quirós a figuras de primerísimo orden en el mundo de la literatura como Cela, Lázaro Carreter, Alberti, Moix, Torrente Ballester o Gala; de acercar a los alumnos al mundo de la lectura y el teatro; de impulsar un museo de altísimo valor artístico y una completa biblioteca; de la publicación de tesis doctorales y la revista "Nueva conciencia". García concluyó su intervención expresando que el homenaje a Castañón "debería haber sido realizado en vida de ella, para que sintiera nuestro calor. Pero alcanzó demasiado pronto su Ítaca".

Por su parte, el escritor y periodista Francisco González Orejas, ex alumno de Castañón, recordó que "el Bernaldo de Quirós era más que un centro educativo, pues había profesores que estimulaban el deseo de conocimiento, un lugar con arte en las paredes y manifestaciones culturales continuas". "Gracias a personas como Carmen Díaz Castañón, vivimos unos años de formación llenos de posibilidades de crecimiento individual. Y se le debía un reconocimiento desde hace mucho tiempo", finalizó el periodista.

La escritora y ex alumna Susana Pérez-Alonso, intervino a continuación para manifestar que "Carmen Castañón nos dio la oportunidad de ser todos iguales. Rompió moldes y creó generaciones de alumnos a los que abrió las puertas del arte y la literatura". "Yo estudié en el Oxford y el Cambridge de la cuenca minera", exclamó la escritora, para la que Castañón no mereció su trágico final y el olvido posterior. Pérez-Alonso terminó su intervención solicitando al alcalde de Mieres, presente en el acto, una calle con el nombre de la añorada directora.

El catedrático Perfecto Rodríguez comenzó su alocución expresando que "ya era hora de dedicar un recuerdo a Carmen Castañón" y rememoró sus "diez años felices de docencia en el Bernaldo de Quirós", con la labor investigadora, de enseñanza y buen gobierno de Castañón, y lamentó que "las instituciones la condenaron al olvido, pues se premia la mediocridad y se castiga la excelencia". "Carmen Castañón llevó su instituto a la élite. Fue un auténtico lujo para Mieres" concluyó Rodríguez.

Finalmente se dirigió al público Diego Álvarez, hijo de la homenajeada, que leyó un texto de su hermana María en el que se expresaba el agradecimiento familiar por el recuerdo tributado a su madre.

Tras la exhibición de un vídeo con testimonios de antiguos alumnos, Sergio Gutiérrez despidió el acto manifestando que "el homenaje era necesario pero no suficiente" y anunció la creación por parte de la Asociación Cultural Camín de Mieres de un galardón anual que llevará el nombre de Carmen Díaz Castañón.