Luis José Fernández no se despega del móvil. Es el sacerdote de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción en Pola de Laviana y el WhatsApp se ha convertido en una de las herramientas más importantes para estar comunicado con los feligreses de las nueve iglesias que tiene a su cargo. "Parece que hoy todo el mundo está pegado al móvil. Nos pasamos el día con WhatsApp y con Pokémon, ¿por qué los curas no nos vamos a poner en el móvil?".

Desde esta semana, cuando se sienta a confesar, activa una nueva aplicación: Confesor Go. "Un amigo mío me avisó de que se ponía en marcha esta aplicación y me propuso ayudar en la difusión aquí en Asturias", explica Luis José Fernández, que añade: "Me pareció una buena idea, que podía ir muy acorde con la idea del papa Francisco de que hay que salir a las periferias y estar en todos los sitios para anunciar el Evangelio. Ocho sacerdotes asturianos ya han solicitado darse de alta en la aplicación. La mayoría son de Oviedo, pero también los hay de Arriondas, Ribadesella o los Oscos. "Es muy útil porque hoy en día hay curas con muchas parroquias que no tienen tiempo para atender a todos los feligreses. Ahora, usando la aplicación, todos pueden ver si están en la Iglesia o se encuentran en otro sitio".

En Asturias, Fernández se ocupa de validar todas las solicitudes de los sacerdotes que quieren darse de alta en Confesor Go. "Aparecer como notario en la aplicación consiste, primero, en darla a conocer entre los sacerdotes y los laicos. Además, cualquier cura de Asturias que quiera apuntarse tiene que hablar primero conmigo. Así se comprueba que es sacerdote de verdad". En teoría, para darse de alta basta con enviar un correo. Para evitar problemas todos los trámites se hacen a través de colaboradores que conocen a los religiosos de sus provincias. ¿Si llega un correo a la dirección diciendo que es un sacerdote que se quiere apuntar, quién da fe de que es verdad y no se trata de alguien que quiere fastidiar un poco a la gente?", explica Luis José Fernández. "La confesión es algo muy sagrado, es lo por lo que la gente quiere pedir perdón a Dios. Yo conozco a todos los sacerdotes de Asturias y puedo saber quién lo es de verdad o no".

A sus 26 años, Luis José Fernández es el cura más joven de Asturias. Lleva un año en Pola de Laviana y ha introducido varias innovaciones en su parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, la última ha sido la celebración de Holywins la fiesta de la Iglesia para hacer frente a Halloween. "Uso sobre todo el móvil, tengo twitter y facebook, pero sólo utilizo el facebook de la parroquia para dar difusión a las actividades que hacemos desde aquí", explica. "La aplicación va a tener buena acogida pero lenta. Hoy en día parece que a la gente le cuesta eso de confesarse, aunque también hay personas con muchas ganas de hablar de las cosas que les preocupan. Yo creo que esto puede venirnos muy bien a todos: a los feligreses porque saben cuándo y dónde podemos estar disponibles y a nosotros para estar cerca de ellos. A veces estamos tan liados que se agradece disponer de una herramienta para avisar si estamos disponibles".

El proceso para aparecer visible en Confesor Go es muy sencillo. "Cuando estamos disponibles, encendemos la aplicación y pulsamos en la parte que dice : empezar a confesar. Lo siguiente es poner el lugar en el que vamos a confesar, en este caso yo pongo mi parroquia. A partir de aquí cualquier persona que entre en Confesor Go me ve activado para las personas que se quieran confesar".

Fernández asegura, que al principio, puede costar un poco porque hay que acordarse cada día de encenderlo y apagarlo. "No vaya a venir alguien y que nosotros no estemos", añade. "Yo creo que esto puede dar mucho fruto con el tiempo. Cuando lleguen las vacaciones, nos vayamos fuera y necesitemos hablar con un sacerdote podemos saber donde hay alguien confesando y cómo podemos llegar hasta allí".