El caso de Yuma Calderón, la joven de 14 años de Caso que no tiene acceso al transporte escolar desde su pueblo de La Felguerina, llegó ayer a la capital asturiana. Y lo hizo a través de una manifestación en la que participaron un centenar de personas quienes, desafiando la lluvia, realizaron una marcha desde la plaza del Ayuntamiento hasta la plaza de España, sede de la Consejería de Educación. El mensaje era claro: "Todos somos Yuma"; pero no todos parecían escucharlo, tal y como habían denunciado desde IU, principales defensores de que la pequeña pueda disfrutar del transporte escolar.

La manifestación llegó a la consejería alrededor de las once y media. Héctor Calderón, padre de Yuma, agradeció el apoyo de los presentes y entró en las oficinas de Educación con la intención de hablar con su máximo responsable, Genaro Alonso. "Espero que nos escuche y nos asegure que el problema va a estar solucionado cuanto antes", decía antes de entrar. No tardó ni cinco minutos en dar la vuelta. "No nos quieren recibir", le dijo a los manifestantes; y comenzó a corear junto a los presentes varias consignas haciendo alusiones al origen rural de Alonso -natural del concejo de Aller- comparándolo con el caso de su hija. Entre los participantes se encontraba la diputada de IU Concha Masa, quien aseguró que su partido "ha manifestado reiteradamente que apoyamos cualquier reivindicación de transporte escolar en Asturias". La representante regional de la coalición de izquierdas explicó que ya habían avisado al consejero, durante la comparecencia para explicar los presupuestos de Educación, "que no íbamos a tolerar que ningún escolar del Principado, aunque viva en el sitio más recóndito, tenga dificultades para trasladarse a su centro educativo público, y exigiremos que se resuelva cualquier caso particular que tenga una necesidades específicas".

El caso de Yuma no es único, pero sí destacado. La joven vive con sus padres en La Felguerina, situado a siete kilómetros de Coballes, por donde sí discurre el transporte escolar. Hasta ahora, era el Ayuntamiento de Caso quien sufragaba el taxi para llevar a la pequeña desde La Felguerina hasta Coballes, pero se ha quedado sin dinero para solventar este problema. De este modo, son sus padres los que tienen que llevar a la niña cada día hasta Coballes para que coja el autobús. El Principado cuenta con unas ayudas para sufragar parte de estos desplazamientos, pero acaban de convocarse y, por lo tanto, no se pagarán hasta dentro de unos meses. Sus padres necesitan una solución mucho más inmediata.