Tras un convulso fin de semana en torno a la gestión del albergue de animales de Mieres, el Ayuntamiento ha encontrado ya una solución temporal que parece haber sido del agrado de los voluntarios. La protectora avilesina Alma Animal asumirá desde hoy mismo la gestión de la perrera. El colectivo, ante la polémica generada, ha dado un paso al frente, y tras reunirse en la mañana de ayer con el Ayuntamiento de Mieres, y perfilar los detalles durante la tarde, asume hoy, salvo cambios de última hora, el cuidado de los casi cien animales que se encuentran en el depósito.
La polémica en torno a la perrera se generó durante la pasada semana. La protectora que gestionaba el centro y cuyo contrato expiró en enero, decidía a mediados de semana dejar el sábado las instalaciones. El Ayuntamiento se puso a trabajar para buscar una solución temporal hasta que el concurso para adjudicar la gestión del albergue estuviese listo. Tras contactar con protectoras y empresas, finalmente logró que el centro canino La Ería, de Llanes, asumiese la gestión desde el sábado.
Sin embargo, el perfil de la empresa y de su responsable no fue del agrado de los voluntarios, que intuían sacrificios de animales. Iniciaron una potente movilización con concentraciones y movimientos a través de las redes sociales. El resultado de esta presión fue que en la tarde del domingo, el responsable de "La Ería" rompió el acuerdo con el Ayuntamiento y entregó las llaves de la perrera. Vuelta a empezar.
La mañana de ayer fue movida. Primer hubo una reunión entre la presidenta de la protectora Alma Animal, Silvia López, y la concejal de Urbanismo, Delia Campomanes. En ese encuentro se perfiló un acuerdo para que el colectivo animalista se hiciese con la gestión del albergue. La propia Silvia López explicaba que "en ningún momento pensamos en llevar un albergue, pero ante la situación excepcional y la polémica generada pensamos que, por los animales, teníamos que dar un paso adelante". De esta forma, se harán temporalmente con la gestión de la perrera por un plazo de unos dos o tres meses, hasta que se concluya el proceso de adjudicación del servicio. Un concurso que elevará las condiciones económicas hasta dejar la inversión municipal en cerca de 50.000 euros brutos mensuales
Silvia López, además, reclamó la colaboración de todos los voluntarios y de la sociedad mierense para ayudar en las tareas de gestión del centro. "Esperemos que todo ese movimiento que ha habido en las redes sociales se transforme ahora en apoyos", indicó. Y es que el albergue lleva mucho trabajo y gasto. Tanto como que según los últimos cálculos, solo en pienso los animales consumen dos toneladas y media mensuales.
La máxima de la protectora coincide también con las peticiones de los voluntarios del albergue, que paralelamente a la reunión entre Alma Animal y el Ayuntamiento realizaban una concentración ante el edificio consistorial exigiendo una solución. Con una pancarta en la que exigían que no se privatizara el albergue de Mieres, los voluntarios fueron tajantes en su principal demanda: "Sacrificio cero". Precisamente esta es una de las máximas de Alma Animal, una con un centenar de socios, y que desde hoy se hará cargo del albergue.
