Los trabajadores de la factoría que Thyssenkrupp Airport Systems tiene en el polígono industrial de Baíña (Mieres), dedicada a las pasarelas de aeropuerto o "fingers", mantendrán el calendario de paros hasta que analicen la nueva oferta presentada por la dirección de la empresa en lo que se refiere al convenio colectivo. Una propuesta que incluye algunas mejoras salariales y sociales sobre la anterior, y que los sindicatos tenían previsto trasladar a la plantilla durante la jornada de ayer y la de hoy.
Los representantes de los trabajadores mantuvieron en la tarde y noche del miércoles un encuentro con la empresa en el Sasec (Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos). En la reunión, la empresa puso sobre la mesa una nueva protesta que los sindicatos no han querido concretar más allá de que mejora la anterior que había Thyssenkrupp. En ese documento anterior, la empresa contemplaba un incremento salarial del 1, 1,2 y 1,3 por ciento para los años 2016, 2017 y 2018. La nueva propuesta incluye ahora alguna mejora social que los trabajadores deberán estudiar para decidir si cancelan definitivamente los paros o mantienen, como es el caso, las protestas. Ayer, al estar inmersos en plena negociación, la plantilla acudió a su puesto de trabajo pese a estar prevista la primera de las jornadas de huelga.Falta de entendimiento
La pasada semana, los trabajadores decidieron recrudecer las movilizaciones ante el silencio de la empresa respecto a la negociación de un convenio que llevan dos años intentando renovar. Pese a que hace quince días hubo un primer contacto, empresa y trabajadores no volvieron a sentarse hasta ayer. Por ello, en mitad del clima de tensión, los operarios decidieron convocar cuatro jornadas de paros completos -ya los había realizado parciales-, en la planta de Baíña. El de ayer, que no se celebró, era el primero. Aún siguen vigentes los convocados para los días 3, 9 y 11 del próximo mes de mayo.