La residencia geriátrica de Riaño tiene ocupadas las 40 plazas disponibles y las otras 78 plazas previstas serán habilitadas "en dos fases a lo largo de esta legislatura". Así lo aseguró ayer la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, que asistió junto a la gerente del organismo autónomo Establecimientos Residenciales de Ancianos (ERA), Graciela Blanco, al primer aniversario
Varela fijó para el próximo año la apertura de otras cuarenta plazas, que llevarán consigo la creación de dieciséis empleos, mientras que en 2019 estarían disponibles las 38 restantes, con otros dieciséis puestos de trabajo. Se generarían, por tanto, en el equipamiento 32 empleos en dos años. "Tenemos que tener los recursos para ir abriendo", indicó la consejera de Servicios y Derechos Sociales, que añadió que la prioridad en la habilitación de nuevas plazas residenciales se sitúa en este ejercicio en los geriátricos de Sotiello, en la localidad allerana Moreda, Arriondas y de El Nodo, en Avilés.
El centro de día de Riaño, añadió Pilar Varela, "tiene actualmente tres usuarios y están previstos otros tres ingresos". Junto con estos dos servicios el Centro Polivalente de Recursos de Personas Mayores alberga el centro de día para personas con discapacidad, gestionado por la Fundación Asturiana de Atención y Protección a Personas con Discapacidades y Dependencias (Fasad), y el centro social de personas mayores. Son los cuatro servicios que presta el complejo asistencial construido en Riaño.
Los trabajos de construcción de la primera residencia geriátrica pública de Langreo tuvieron un presupuesto de 6,9 millones de euros. Fueron adjudicados a finales de 2012 y concluyeron a principios de 2015. La superficie del equipamiento es de 9.700 metros cuadrados.
Centro de discapacitados
La Consejera de Servicios y Derechos Sociales tiene pendiente una reunión con la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, para analizar la puesta en marcha del centro de discapacitados Stephen Hawking de Barros. El encuentro fue aplazado en dos ocasiones pero Varela confía en que se pueda celebrar en breve. "El Imserso tiene que acabar la obra y amueblar y consignó dinero para ambos en el presupuesto", dijo. Resta además fijar el modelo de gestión, añadió, "creo que tienen bastante claro que será público". Recalcó además que los Gobiernos regional y local están en "permanente contacto" dado que "el objetivo de las dos administraciones es que el centro se ponga en funcionamiento".
