La Fundación Comarcas Mineras (Fucomi), dedicada a la formación en oficios para desempleados, acumula una semana de retraso en el pago de salarios. Está afectada toda la plantilla, cerca de un centenar de personas: desde profesores hasta los propios alumnos, que reciben un sueldo para poder acudir y mantenerse en los cursos. Los responsables de administración de Fucomi aseguran que esta demora está motivada por un retraso en el pago de subvenciones y que se resolverá "en unos días".
La mañana fue intensa. Los alumnos amenazaron a primera hora con hacer una huelga, pero sus profesores les convenecieron de entrar al trabajo como cada día. No descartan movilizarse, por lo que reclaman el apoyo de todos los afectados. Además de los alumnos, según ha podido saber este diario, tampoco han cobrado aún profesores, monitores ni responsables de proyectos.
La dirección de Fucomi evitó hacer declaraciones y remitió a este diario a los responsables de administración. Éstos confirmaron que el problema se solventará en unos días: "Ya se ha tramitado toda la documentación", aclararon.
Esta polémica se suma a lo ocurrido a principios de año, cuando la Fundación recibió una mala noticia: un recorte de fondos "brutal", según denunciaron en aquel momento responsables municipales y sindicales. En cifras, de una convocatoria de 4,12 millones de euros en subvenciones para la formación de parados, Fucomi recibirá sólo 56.656 euros. Presupuesto para un único curso, después de que la entidad solicitara veintidós.
A lo largo de las últimas dos décadas, la Fundación Comarcas Mineras ha desarrollado más de un centenar de proyectos: escuelas taller y talleres de empleo. Por sus instalaciones, con sede central en La Cuadriella de Turón, han pasado más de 20.000 desempleados. En los años de mayor actividad, Fucomi también organizó la Universidad Popular. Se trataba de una amplia oferta de cursos en sectores tan variados como el turismo, los idiomas o el deporte. La inscripción estaba abierta a todos los vecinos de las comarcas. Tenía una buena afluencia pero se canceló, en 2015, durante un proceso de recortes de la entidad.
